Según lo confirmado por el Ministerio de Gobernación (Mingob), más de 100 días han pasado sin el ingreso de aeronaves relacionadas con el narcotráfico a Guatemala. En este marco, el ex ministro de Gobernación Carlos Menocal argumentó que la reducción de ingresos aéreos no constituye por sí sola una solución al narcotráfico, por lo cual, propuso abordar la problemática desde una estrategia integral que cubra la seguridad de la ciudadanía, la cooperación internacional y cobertura a nivel local.
102 DÍAS SIN EL TRASIEGO AÉREO
Pablo Castillo, vocero del Mingob, confirmó que al 9 de septiembre se han acumulado 102 días sin el aterrizaje de vehículos aéreos con droga. Según el video institucional publicado el 7 de septiembre esto responde a una coordinación interinstitucional de la Policía Nacional Civil, el Mingob, el Ejército de Guatemala, bajo la gestión del presidente Giammattei.
“Todos los días nuestros hombres y mujeres en la Policía y en el Ejército tienen que tener claro que el objetivo común de nación es ser un país libre de tráfico de drogas”, dijo Alejandro Giammattei. No obstante, el tráfico de los ilícitos puede manifestarse en otras rutas además de la aérea.
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Récord en remesas, agosto reportó US$1,388 millones ? [https://t.co/2nC3L9gnQB] pic.twitter.com/7br4CSUUxt— Diario La Hora (@lahoragt) September 9, 2021
PESE A APARENTES RESULTADOS, EL NARCO SIGUE LATENTE
Menocal consideró la disminución del ingreso de droga vía aérea como un avance positivo, pues “esto merma y desmotiva la participación del narcotráfico vía aérea y que dejen de ver el territorio nacional como fácil para hacer estos aterrizajes”. Asimismo, reconoció que estas acciones son producto de “esfuerzos combinados entre fuerzas de la policía, del Ministerio de la Defensa Nacional con el apoyo del gobierno de Estados Unidos”.
No obstante, destacó que el tráfico sigue siendo un problema latente en el país al ser un corredor entre el continente. “Es un hecho alentador que las aeronaves ya no aterricen en Guatemala, sin embargo, también es importante analizar el fenómeno del narcotráfico desde una visión regional y es que el Triángulo Norte es un territorio obligado para el traslado de drogas hacia el norte”, declaró.
Según el Informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés), en la mayoría de países con movimiento de droga “se interrumpieron las actividades durante la primera fase de la pandemia (al menos en cierto grado), pero han demostrado ser resistentes: a finales de 2020 la mayoría de la droga los mercados se habían recuperado o estaban en vías de recuperación”.
Menocal indicó que el consumo de droga en Estados Unidos continúa siendo significativo; “en EE. UU. mueren más de 30,000 personas por exceso de consumo de drogas”, acotó. Por tanto, sugirió no olvidar que existen más vías del narcotráfico además de la aérea: “No es tan fácil decir ‘ya hicimos esta acción y ya con eso el narcotráfico ha mermado’, eso no es cierto; sigue siendo evidente que la droga sigue pasando a escalas muy importantes en el país y una de ellas es la cuestión terrestre”, formuló.
EL TRÁFICO CONLLEVA PRESENCIA DEL CRIMEN ORGANIZADO
Por otro lado, el exministro explicó que el tráfico de droga, además de conllevar una dinámica de comercio ilícita también implica la presencia del crimen organizado en las regiones.
Recientemente se conoció a través de redes sociales un video supuestamente de un miembro del Cartel de Jalisco, México amenazaba a la Policía Nacional Civil guatemalteca (PNC). En el audiovisual se referían a la PNC y un individuo que identificaron como “Chepe”, solicitando el retorno de objetos decomisados el 12 de mayo en Raxruhá, Alta Verapaz.
“Al cartel de Jalisco no nos roba nadie, ningún pinche guatemalteco de mierda nos va a venir a robar a nosotros y mucho menos ustedes, pinches mugrosos policías -PNC-. Óiganlo, ya nos levantamos un chingo de gente allá en la Mesía por rateros, para que no nos levantemos unos pinches rateros como ustedes”, dijo el grupo en el audiovisual.
Para Menocal la presencia del crimen organizado es un peligro principal para la población en el territorio de trasiego de droga. El peligro de la presencia de estos grupos, según detalló, radica en que en un futuro “podríamos experimentar escenarios donde estructuras del narcotráfico tengan ocupados algunos territorios y que la ley que se imponga sea la ley del narcotráfico y no la del Estado de Guatemala”.
¿CUÁL DEBE SER EL ACTUAR DE LAS AUTORIDADES?
“Guatemala sigue siendo, al igual que el Triángulo Norte una ruta obligada del trasiego de drogas”, aseguró el exministro, “y lo preocupante en este año es la presencia de organizaciones internacionales que empiezan a tener mayor fuerza en el territorio nacional y que evidentemente vienen a erosionar la situación en el país”, agregó.
En ese sentido argumentó que el Estado de Guatemala debe crear un plan integral a nivel local y de cooperación con los países que consumen droga y los que la fabrican. “La cuestión es mejorar estos controles, establecer una agenda colectiva de cooperación con los países productores y consumidores e ir haciendo métodos especiales de investigación”, sugirió.
Asimismo, se debe señalar la corresponsabilidad de los países que consumen drogas en el Norte de América e invertir en la seguridad de las comunidades afectadas por el paso del narcotráfico.
“Al final combatir el narcotráfico significa la inversión de recursos, solo la Dirección de Asuntos Antinarcóticos tiene al menos Q14,000,000. Estos recursos también deben ser invertidos en la seguridad de la población”, concretó el exfuncionario.