La administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris compartió detalles de la estrategia para abordar la migración irregular desde Centroamérica, que aseguran contribuye a un enfoque humano y seguro para gestionar, así como ampliar la protección y mejorar el acceso a las vías legales para migrar.
Sobre esto, la Casa Blanca explica en un comunicado que está impulsado, por la creencia del gobierno de los EE. UU., que todas las personas encuentren seguridad, una vida estable y digna dentro de sus propios países.
Agregó que, cuando ese no sea el caso, el asilo y otras vías de migración legal deberían estar disponibles para quienes los necesiten.
HAN TRABAJADO EN EL LANZAMIENTO DE LA ESTRATEGIA
La Administración, a la vez, asegura que, durante los últimos seis meses ha consultado con gobiernos socios, miembros del Congreso, su personal, organizaciones internacionales, de la sociedad civil, sindicatos y el sector privado para informar el desarrollo de la estrategia.
Aseguran que es la primera estrategia del gobierno de los EE. UU., centrada en fortalecer los esfuerzos cooperativos para gestionar la migración segura, ordenada y humana en América del Norte y Centro.
“Estados Unidos tiene fuertes intereses de seguridad nacional, económicos y humanitarios en la promoción de una migración segura, ordenada y humana”, explican.
Por otro lado, señalan que, al mejorar el apoyo humanitario, las protecciones regionales e invertir en la gestión de la migración, Estados Unidos ayudará a construir una región más estable, fortalecerá las vías legales para quienes deben migrar y reducirá la migración irregular.
¿DE QUÉ HABLA LA ESTRATEGIA?
De ese modo, la Casa Blanca señala que la Estrategia de Migración, incluye las siguientes líneas de esfuerzo: estabilizar las poblaciones con necesidades agudas, ampliar el acceso a la protección internacional y el acceso a la protección en los países de origen.
Además, se incluye mejoras y la expansión de los programas de trabajo temporal en la región con protecciones al trabajador, así como ayudar y reintegrar a las personas retornadas.
Por otro lado, la estrategia, habla de fomentar una gestión de fronteras seguras y humanas, fortalecer la mensajería pública regional sobre migración, así como ampliar el acceso a vías legales de protección y oportunidades a los Estados Unidos.
“La implementación de la Estrategia de Migración integrará varias herramientas del gobierno de EE. UU., incluida la diplomacia, la asistencia extranjera, la mensajería pública y las iniciativas de inmigración de EE. UU.”, mencionan.
Finalmente, destacan que se apoyará en la experiencia de una amplia gama de departamentos y agencias de EE. UU., con el apoyo de gobiernos dentro y fuera de la región, organizaciones internacionales, la sociedad civil, el sector privado, organizaciones multilaterales, instituciones financieras internacionales y el Congreso de EE. UU.
Estas asociaciones reforzarán el impacto de la estrategia migratoria al informar las intervenciones programáticas, aprovechar la voluntad política y movilizar los recursos necesarios.