Por Grecia Ortíz
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Sin duda la gastronomía guatemalteca se destaca por su colorido, sabor y también por la relación estrecha que guarda con las tradiciones del país, así que con el mejor ánimo y dispuesto a conocer los principales platillos nacionales, el fotógrafo guatemalteco Carlos López Ayerdi, inició un viaje en el que familias de diferentes departamentos le han abierto las puertas de sus hogares para estrechar lazos a través de la comida y exponerla en un nuevo libro.
De hecho, fue el Pepián, considerado como Patrimonio Cultural Intangible de la Nación por el Ministerio de Cultura y Deportes, la primera de las recetas que formará parte de un libro en el que el fotógrafo incluirá sus vivencias y otros detalles de cada una de las comidas que documente a lo largo de su viaje.
Ayerdi, contó a La Hora Voz del Migrante, que la idea de iniciar este viaje surgió en 2016, momento en el que se percató de la importancia de documentar la gastronomía guatemalteca.
“En esta oportunidad definitivamente quiero que resalte el valor de quien prepara los alimentos… esto es resaltar su valor porque el platillo que hace y no viene de su mamá. Así que quiero destacar la gastronomía y la calidad de platos como el Pepián”, comentó.
Así que, a través de su trabajo, el entrevistado dice que espera que todos puedan admirar la gastronomía guatemalteca a través de la fotografía, con la que las personas se muestren interesadas en probar los diferentes platillos.
UN NUEVO PROYECTO
Para acompañar el proceso de preparación del Pepián, Ayerdi viajo hasta Todos Santos en Huehuetenango, lugar en el que una familia le abrió las puertas de su hogar.
Y posteriormente ha visitado otros lugares y platillos que publicará en redes sociales bajo el proyecto «Gastronomía Ancestral de Guatemala».
“Dividí a Guatemala en ocho regiones como esta en la Constitución para llevar un orden, esa es la idea, cubrir, aunque no es de cubrir ocho platos. Pero tengo planeado que en seis meses por lo menos logre documentar unos 50 platillos en un lapso de seis meses o antes si es posible, ahora voy a estar preparando el libro”, afirmó.
Con lo que ha logrado documentar, Ayerdi dice que se ha percatado de todo el proceso que se realiza en las cocinas de las familias guatemaltecas, a la vez se dio cuenta que cada persona agrega algunos ingredientes que considera le pueden dar un mejor sabor al platillo.
CADA RECETA LLEVA UN TOQUE PROPIO
Además, el libro, incluirá bajo el contexto de las propias familias, las recetas que no resulten complejas de replicar.
“Las recetas al final van a ser diferentes, pero al final las vamos a identificar inmediatamente porque el Pepián no hay pierde, el que vi llevaba pollo de los que la señora tenía en su casa, el recado es de tomate, miltomate y hasta tomate extranjero, chile guaque, pasa, especias y todo lo mezclo y lo licuo para echarlo al caldo cuando estaba hirviendo y cinco minutos antes de apagarlo le echa masa o tortilla que es con lo que espesa”, contó.
Mientras que el arroz que acompaña el plato era blanco y la bebida era café caliente, recordó.
La Hora Voz del Migrante, publicará varias de las recetas que Ayerdi incluirá en su libro, y también parte de su recorrido alrededor del país.
