La Hora Voz del Migrante conversó con Charanya Krishnaswami, directora de incidencia en las Américas de Amnistía Internacional en Estados Unidos, quien explicó que se sienten horrorizados por el Acuerdo de Cooperación de Asilo (ACA), que recién se implementó en Guatemala, porque pone en peligro a solicitantes de asilo que ya son vulnerables.

Además, anotó que creen que EE.UU., intimidó a Guatemala, El Salvador y Honduras a que firmaran estos acuerdos, al amenazarlos con retener ayuda e imponer impuestos.

Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

La representante de Amnistía Internacional, explicó que aunque no pueden imponer demandas, trabajarán de cerca al Congreso de Estados Unidos para garantizar que el acuerdo no entre en vigencia.

“Trabajamos mucho con el Congreso, realizamos muchas actividades de promoción en –Washington- DC, por lo que abogaremos por la terminación inmediata de este acuerdo, en realidad no litigamos, así que no iniciaríamos una demanda, pero como siempre hemos estado desafiando estos acuerdos con defensa del Congreso”, anotó.

Para la entrevistada, existen varias preocupaciones relacionadas al ACA, empezando por el hecho de que Guatemala no tiene las condiciones de vida óptimas para sus ciudadanos, así que no se podría esperar que puedan proteger a los solicitantes de asilo.

A la vez, destacó que los procedimientos de asilo en el país tampoco estarían preparados, así que pretender la implementación del plan es forzar la situación y tampoco es posible.

Por otro lado, dijo que debido a que se han conocido algunos documentos que no habrá abogados adecuados en estos procedimientos que entiendan de los procedimientos de este tipo.
En ese sentido, la directora de incidencia en las Américas de Amnistía Internacional en EE.UU., aseguró que se puede decir que Guatemala no tiene la capacidad de atender las solicitudes de asilo y si bien apoyan a que se construya esa capacidad, ahora mismo no se tiene.

CREEN QUE ACUERDO FUE FORZADO

Asimismo, Krishnaswami, cree que existen aspectos que no debieron darse en este acuerdo en primer lugar y al principio cuando vieron las noticias de la posible implementación esta semana, pensaron en como Estados Unidos está intimidando a países como Guatemala, El Salvador y Honduras para que firmará los acuerdos, al amenazar con impuestos, retener ayuda y otros aspectos.

“Este es un acuerdo que fue forzado a Guatemala. Creo que estoy realmente preocupada por las irregularidades”

Charanya Krishnaswami, directora de incidencia en las Américas de Amnistía Internacional en Estados Unidos

En ese sentido, puntualizó que lo que están tratando de hacer es trabajar con el Congreso, que tiene la habilidad para ver en que se están gastando los fondos federales, así que lo que están diciendo es que no permitan que el dinero federal sea utilizado para estos acuerdos de asilo.

“Estamos llamando al poder ejecutivo para que abandone este acuerdo y trabajaremos en el Congreso para tratar de hacer que use su poder para retener la implementación del acuerdo, pero es complicado porque finalmente el Congreso tiene un poder limitado, pero que puede trabajar para que hagan lo que puedan para detener estos acuerdos”, puntualizó.

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