Migración.
Las autoridades buscan, con este proyecto, regularizar la situación de los migrantes, a través de la expansión de rutas legales hacia EE. UU. y otros países. Foto La Hora / Archivo.

El plan piloto anunciado por el gobierno de Guatemala en conjunto a Estados Unidos para atender a migrantes y refugiados, ha generado una serie de opiniones, ya que expertos consideran que el Ejecutivo no tiene las capacidades necesarias para enfrentar una posible crisis migratoria dentro de las fronteras del país.

El programa, extendido con una duración de seis meses, fue anunciado por las autoridades de ambos países el pasado 1 de junio, indicando que las oficinas comenzarán a aceptar citas en Guatemala a partir del próximo 12 de junio, teniendo como base de gestiones el sitio web movilidadsegura.org.

Las autoridades buscan, con este proyecto, regularizar la situación de los migrantes, a través de la expansión de rutas legales hacia EE. UU. y otros países. Asimismo, ayudará a tramitar los procesos de reunificación familiar y acceso a visas de trabajo temporales.

 

El programa aplica para personas originarias de Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua, siendo una forma para que las personas puedan migrar de manera regular, ya sea hacia Estados Unidos, México, Canadá y España, por diferentes aspectos, entre reunificación familiar o la búsqueda de un empleo.

Expertos consultados explican un escenario en el que se podrían registrar acciones contraproducentes en el país, ya que, esto generaría un ingreso masivo de migrantes que buscan asilo político en el país, y consideran que Guatemala no posee la capacidad para proveer los servicios básicos que los migrantes necesitan.

DABROY: “ES UNA PUESTA EN MARCHA DE LA POLÍTICA EXTERIOR”

Jahir Dabroy, coordinador del departamento de investigaciones sociopolíticas de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), señaló: “Esta idea no es una iniciativa que nace de manera genuina y exclusiva por parte de las autoridades guatemaltecas, sino que es una puesta en marcha de la política exterior, en este caso abordando el tema migratorio por parte de los Estados Unidos”.

Dabroy también se refirió a que este plan piloto, con extensión de seis meses, podrá ser una puerta para la ampliación y aplicación de los Centros de Procesamientos Migratorios en el país.

Junto a esto, enfatizó que este plan probablemente está enfocado en el tema de desarrollar un plan piloto que permita mejoras, sobre todo para el tema del Registro de las Personas, como paso previo a la solicitud de asilo.

Por lo que enfatizó, “los Estados Unidos, dentro de su lógica de política exterior, siempre ha manejado el tema de tener el control, de qué es lo que está pasando y, sobre todo, tener la información, en este caso, de quiénes son las personas que pretenden ingresar a dicho país”.

Dabroy comentó que mientras se desarrollan estos programas, la política exterior de Estados Unidos lo que está buscando es detener la migración, lo que probablemente traerá efectos negativos a Guatemala, con respecto a las caravanas de migrantes que se movilizaron a las fronteras de Guatemala.

MARTÍNEZ: “ESTADOS UNIDOS ESTÁ EXTERNALIZANDO LA FRONTERA”

Para Aracely Martínez, experta en temas migratorios esta alianza, “es un compromiso muy importante para atender con todas las garantías de derecho a las personas migrantes que solicitan asilo en Guatemala, pero para ser redirigidos a Estados Unidos”.

La entrevistada enfatizó que el gobierno, “tiene que contar con los fondos necesarios para garantizar la ayuda humanitaria, mientras que se les otorga asilo o son devueltos a sus países”.

Martínez señaló que este compromiso requiere mucha coordinación interinstitucional, por lo que enfatizó: “Si el gobierno se comprometió, quiere decir que tiene que sacar dinero para estas funciones y organizarse bien con las instituciones para garantizar que se cubran todos los derechos, porque si no vamos a tener población flotante dentro del país, lo que creará una mayor crisis migratoria”.

Además, expresó que de momento hay muchas dudas en el ambiente, “hasta ahora no se sabe cómo se trabajará en estas oficinas de atención a los migrantes, ni qué apoyo les darán a los migrantes, ni la logística que utilizarán, lo que pone en duda el buen funcionamiento de los centros, puesto que están a días de iniciar su funcionamiento”.

Por último, Martínez manifestó: “Lo que preocupa también es como Estados Unidos está externalizando la frontera, o sea, está externalizando los servicios”, indicando que este podría ser el inicio de una crisis migratoria aún más grande dentro de la región, puesto que los procesos no se realizarán de primera mano en Estados Unidos lo que retrasa el tiempo de notificación.

CASTRO: “NO SE TIENE LA INFRAESTRUCTURA, NI LA CAPACITACIÓN”

Fernando Castro Molina, analista migratorio, indicó que esta medida tomada por “ambos gobiernos”, no es más que una “imposición” de EE. UU., para frenar la migración en las zonas fronterizas de aquel país, y trasladarlas a otros países, lo que conlleva una responsabilidad de atender a los migrantes que buscan asilo en el país norteamericano.

Castro expuso: “Esta decisión creará un conflicto migratorio en las zonas fronterizas y dentro del territorio nacional”, comparándolo con la crisis ubicada en Chiapas, México, en donde cientos de miles de personas migrantes están acumulándose a las afueras de las fronteras, lo que aseguró, “se ha vuelto una crisis humanitaria migratoria”.

Junto a esto, comentó, “desde mi punto de vista no se tiene la infraestructura, ni la capacitación para poder atender a los migrantes que ingresarán al territorio, mucho menos los recursos para poder cubrir las necesidades que las personas migrantes requieran”.

Castro evidenció que no hubo un tiempo prudente para capacitar a los funcionarios que atienden estas oficinas, ni se realizó la campaña correspondiente de información a la población, lo que ha provocado que exista más dudas que respuestas sobre cómo se procederá el proceso de petición de asilo.

“No se sabe cómo va a hacer el procedimiento para en el caso de los migrantes, o sea, si serán oficinas que van a estar en la frontera e ingresarán a hacer el trámite y luego saldrán nuevamente hacia El Salvador, Honduras o su país proveniente”, determinó Castro.

Asimismo, explicó que, si los migrantes se quedaran dentro del territorio, las autoridades municipales y entidades migratorias deberán colaborar en proveer los servicios básicos que ellos requieran.

PLAN PILOTO EMPEZARÁ A FUNCIONAR EL 12 DE JUNIO PRÓXIMO

El plan piloto empezará a funcionar en Guatemala el próximo 12 de junio y se dio a conocer de manera conjunta por Guatemala y EE. UU., derivado de la reciente visita del asesor de Seguridad Nacional de la Vicepresidenta de Estados Unidos, Phil Gordon, quien el pasado 30 de mayo lideró una delegación de alto nivel de funcionarios de la Casa Blanca y del Departamento de Estado para reunirse con el presidente, Alejandro Giammattei, y parte de su gabinete.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) asegura que las personas refugiadas y migrantes elegibles serán consideradas para obtener la entrada humanitaria y otras rutas regulares a EE. UU. u otros países que puedan ofrecer estas oportunidades.

 

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