El extitular de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Álvaro Omar Franco Chacón, continuó con una extensa declaración de tres horas este martes en la fase final del juicio por el caso de defraudación aduanera “La Línea”, mientras insistió en que no integró la estructura criminal y que la persona a quien hacen referencia en la investigación es otra y no él.
El exfuncionario siguió el argumento de Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti en cuanto a que no se puede demostrar que no son mencionados en las interceptaciones telefónicas por sus nombres y apellidos.
Franco Chacón es señalado junto a otros exfuncionarios del gobierno del Partido Patriota, de supuestamente integrar una red dedicada a la defraudación aduanera.
Durante la exposición de su defensa remarcó que él no formó parte de una estructura criminal dentro del caso “La Línea”, en el mismo sentido, mostró “errores, incongruencias y falencias” dentro de la investigación por parte del Ministerio Público en conjunto de la extinta Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
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SEÑALA UNA MALA INVESTIGACIÓN
Para el exintendente es importante conocer el proceso de las aduanas para así dictaminar un buen juicio, a su consideración, los fiscales, jueces e investigadores del MP no conocían lo suficiente para detallar bien los expedientes.
Así Franco Chacón hizo mención del exjefe de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), Juan Francisco Sandoval, según el sindicado dijo: “No soy experto en aduanas, desconozco el sistema aduanero, pero aquí hubo defraudación aduanera”, también recordó que el juez Miguel Ángel Gálvez dijo: “Es imposible cuantificar la defraudación aduanera”.
Manuel Baldizón intensificó su presencia en las redes sociales. Aquí sus interacciones: #PorSiNoLoVio
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LLAMADAS TELEFÓNICAS
Franco Chacón declaró al Tribunal que el MP utiliza una llamada en donde se tergiversa el contexto de una frase. “¿Omar está listo para tomar la silla?”, él contestó: “Sí, no me rajo”. En tanto, el sindicado explicó que se refería a tomar la silla como superintendente de la SAT.
En la misma línea, desvirtuó la prueba material del MP referente a una llamada en donde se hace alusión al nombre “Omar”. Franco Chacón dice no ser él a quien hacen referencia, sino a “Omar Nájera Samayoa, brazo derecho de Juan Carlos Monzón”, quien fue el exsecretario de la vicepresidenta Roxana Baldetti.
RELATA ORDEN DE CAPTURA
“A mí me informaron que estaba dentro de las órdenes de captura y que el edificio de la SAT estaba rodeado de policías. Yo me entregué”, antes de llegar a la institución la seguridad de Franco Chacón dijo “Usted manda, nos podemos ir a El Salvador”, sin embargo, él se entregó a las autoridades, relató.
“Rápido la policía me puso los grilletes y un cañón en la nuca. La Fiscal Eva Siomara Sosa me pidió los celulares, yo los entregué”. No obstante, el procesado señaló que la orden de aprehensión no solicitaba quitar ningún dispositivo móvil “la fiscal Sosa junto a seis elementos fueron a un juzgado a ampliar esa acta de aprehensión donde pusieron que yo voluntariamente los entregué”, dijo.
PERSECUCIÓN POR PARTE DE LA CICIG
Asimismo, Franco Chacón declaró que existió una persecución hacia sus hijos mayores por parte de la CICIG durante tres años. “Los perseguía un carro Toyota Yaris blanco a todos lados”.
“A mi hijo no le dan trabajo por llevar mi nombre, se llama igual que yo. Una vez le dieron trabajo y ese mismo día le quitaron su gafete por llamarse como yo”, lamentó Franco Chacón.
“Por ser Superintendente de la SAT aproximadamente dos meses y medio, tanto mis hijos, esposa, seres queridos y yo hemos pasado por unas series de vejámenes”, concluyó.
