Por Denis Aguilar
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La Cámara de Industria de Guatemala (CIG) presentó este día el Índice de Actividad Industrial, el cual tuvo una caída del -9.7% a mayo del 2020, en comparación con el mismo periodo de tiempo del 2019, lo cual se atribuye al impacto de la pandemia del COVID-19.
Dicho índice de la CIG, elaborado con el apoyo de la Central American Business Intelligence (CABI), se encuentra en un nivel de 128 puntos, lo cual indica que se está al nivel de las cifras alcanzadas cinco años atrás.
“En el estudio presentado, se logra identificar la caída de producción principalmente en el mes de abril a raíz de las medidas de confinamiento, sin embargo, mayo reporta una caída aún mayor provocada por la inercia de la capacidad productiva”, dijo la CIG en un comunicado.
A principios de año, el indicador presentaba un crecimiento positivo del 0.8%, lo cual se vino abajo en el inicio del pandemia.
Según la CIG, de los 14 sectores de la industria analizados en este índice, 11 ha reportado números negativos.
“Uno de los segmentos más afectados es el de hoteles y restaurantes quienes registran una contracción estimada de -46%. La industria alimenticia, agroindustria y el sector de ropa y calzado también se han visto afectados”, indicaron.
Además, Paulo de León, director del CABI, señaló que unos 100 mil empleos se pueden perder debido a la pandemia, donde el sector más afectado será el de hoteles y restaurantes.
“Se ha producido un círculo vicioso bastante fuerte que parte del confinamiento, el cierre de las actividades económicas, la caída de las ventas y los despidos hasta llegar a un menor poder adquisitivo en las calles”, dijo de León.
Por su parte Luis Alfonso Bosch, vicepresidente de la CIG, dijo que la “emergencia sanitaria sin duda representa un gran reto en temas de salud y economía para el país; la caída de la actividad industrial que hoy estamos viendo en números, se ha visto reflejada en los últimos meses en el cierre de empresas, falta de liquidez, suspensiones laborales y pérdida de empleos”.
No obstante, la CIG señala que esperan una reactivación de la economía a medida que se vaya dando una reapertura gradual y ordenado de las empresas.
Pero recordaron que hay factores en el segundo semestres del año que pueden afectar de manera positiva o negativa la recuperación económico, como lo son las elecciones en Estados Unidos, rebote de los precios en productos como café y azúcar, además de las políticas públicas que se implementen en el país.