Por Cristian Velix
cvelix@lahora.com.gt
Previo a que se empiece a implementar el sistema de los semáforos por el número de contagios de COVID-19 en los municipios del país, el gremio de los centros comerciales manifestó que quiere ser parte de la solución.
Dicho sector expresó que, a pesar que Guatemala es uno de los países de la región con menos contagios y muertos en relación con la población, los centros comerciales se han mantenido cerrados “por más tiempo que en los demás países”.
En ese contexto, explicó que el país ya aplanó la curva de contagios a nivel nacional y hay un descenso “considerable a nivel del departamento central y sus principales municipios por más de dos semanas”.
“La reactivación de los centros comerciales significaría la recuperación de 1 mil 900 empresas formales y de 220 mil empleos, que significaría el recaudo de ingresos tributarios que pueden utilizarse para enfrentar la crisis sanitaria”, añadió esa organización en un documento.
IMPACTO DEL CIERRE
El gremio de los centros comerciales explicó que estos albergan a “la gran mayoría de comercios formales en el país”, al igual que pagan impuestos y generan empleo formal. Esa organización señaló que 1 mil 900 empresas que operan dentro de sus instalaciones están en riesgo.
“205 mil empleos formales en el país serán impactados por estas empresas en riesgo: 93 mil empleos directos y 112 mil empleos indirectos. El Estado está en riesgo de no percibir 1 mil millones en recaudación tributaria de abril a diciembre”, agregó la asociación.
Asimismo, la organización mencionó que Q7 mil 650 millones en ventas han dejado de recibir los negocios formales dentro de los centros comerciarles durante 120 días de confinamiento y estimó que Q456 millones del impuesto al valor agregado (IVA) se dejaron de percibir durante este tiempo.
“Q168 millones en impuesto sobre la renta (ISR) y Q765 millones en impuesto de solidaridad -se dejaron de obtener-”, comentó ese gremio.
MEDIDAS
El sector de los centros comerciales expresó que espacios como mercados municipales están operando en todo el país, sin control de distanciamiento o medidas sanitarias y de prevención en la mayoría de ellos.
“En los centros comerciales no se hacen aglomeraciones, pues se han cancelado todos los eventos especiales. Normalmente hay entre dos y cuatro personas por cada 50 metros cuadrados en horas pico”, subrayó esa organización.
En ese contexto, el gremio manifestó que cuentan con espacios más seguros y controlados para que instituciones sanitarias instalen centros de atención a los ciudadanos, como tomas de pruebas rápidas -de COVID-19-.
De igual manera, la asociación explicó que pueden tener medidas que previenen aglomeraciones, la cancelación de eventos concurridos, cierre de áreas de juegos de niños, reducción de la capacidad de estacionamiento a la mitad y regulación y límite de personas dentro de los comercios.
“Estamos comprometidos con jugar un rol constructivo en la recuperación de nuestro país, por lo que ya estamos preparados para recibir de vuelta a nuestros clientes con medidas sanitarias reforzadas de prevención que aseguran ambientes protegidos para el bienestar de todos”, afirmó ese gremio.
COMPARATIVA
El sector de los centros comerciales explicó que Guatemala es uno de los países con menos casos por 100 mil habitantes en la región y una de las naciones que tiene menor tasa de mortalidad en la región por la pandemia del COVID-19.
A pesar de ello, la organización expuso que “somos los que más tiempo hemos tenido cerrados los centros comerciales” y citó que en Costa Rica, Paraguay, Colombia, Bolivia, Brasil y México el cierre ha durado menos.
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“Los centros comerciales de la región han abierto en su mayoría en color rojo, según los indicadores definidos por el sistema de alertas de Guatemala”, añadió el sector, mismo que indicó que, según la Asociación Guatemalteca de Enfermedades Infecciosas (AGEI), el riesgo de contagio del virus en un centro comercial es menor si se compara con el de transporte público, servicios religiosos o escuelas.
