La jueza Erika Aifán planteó una recusación contra tres magistrados de la CSJ. Foto La Hora/Archivo

Por Cristian Velix
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La jueza Erika Aifán, titular del Juzgado de Mayor Riesgo “D”, presentó una apelación en contra de la resolución del juez Mario Martínez, del Juzgado de Turno de Paz Penal, quien dictó falta de mérito a favor de la oficial Tatiana Elizabeth Guzmán Figueroa, señalada de intentar sustraer información oficial y copia de esa judicatura, además de grabar a la juzgadora.

El juez dejó en libertad a la oficial del órgano jurisdiccional, señalando que no había indicios para que determinaran la necesidad de que ella fuera ligada a proceso, esto luego de que Guzmán fuera detenida el sábado por la madrugada,

En esa medida, la juzgadora interpuso el recurso en el Juzgado Pluripersonal de Paz Penal que tiene en sus manos el expediente, a la cual también se adjuntó la solicitud de que ella se pueda constituir como querellante adhesivo en la investigación.

Para la juzgadora, hay indicios de que la auxiliar judicial pudo haber incurrido en la comisión de delitos flagrantes de obstrucción a la justicia y obstaculización a la acción penal, destrucción de documentos, además de falsedad material.

Asimismo, Aifán señaló que un juez de Paz no tenía competencia para conocer este caso, quien dejó en libertad a Guzmán Figueroa en una audiencia que se practicó en horas de la noche del sábado, día en el que ella permaneció en las carceletas de Torre de Tribunales.

EL INCIDENTE

El lunes anterior la jueza dijo que le manifestó al jefe interino de la Dirección de Seguridad del Organismo Judicial (OJ), Helmut Pérez, que tenía sospechas de que la oficial tenía grabaciones de ella en su teléfono.

Según relató Aifán, el director de Seguridad le requirió a Guzmán Figueroa que mostrara su teléfono, para determinar que la jueza no estaba formulando suposiciones, pero al negarse, Pérez pidió que agentes de seguridad del Organismo Judicial (OJ) custodiaran el celular.

Posteriormente, manifestó la togada, se procedió a llamar a la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y la Supervisión General de Tribunales, para que hubiera, explicó la jueza, personas imparciales durante la diligencia. Así también se llamó al Ministerio Público (MP).

La juzgadora comentó que fue una agente de seguridad del OJ la que revisó el bolso de Guzmán Figueroa, en la que aparentemente se encontraba el teléfono y en el que presuntamente se encontró grabaciones en las que se pudo escuchar su voz.

Sin embargo, Aifán dijo que al momento de buscar el teléfono se encontró en la cartera un folder y documentos que son propiedad de la judicatura, como también una copia que se encontraba alterada, por lo que Guzmán Figueroa fue aprehendida.

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