Salir adelante y cumplir sus sueños fueron los motivos por los que el guatemalteco Fernando Santos decidió migrar de Guatemala a Estados Unidos, ahora con esfuerzo y dedicación espera seguir superándose para darle a sus tres hijos y su esposa un mejor futuro, por supuesto con la mente puesta en alcanzar sus metas de vida.
Fernando se describe como una persona común y en entrevista para La Hora Voz del Migrante, narra que antes de salir del país trabajó por varios años en dos empresas, “estuve en un departamento de circulación por ocho o 10 años, me encargaba de ver lo de sectoristas y voceadores”.
SALIÓ EN BUSQUEDA DE UN MEJOR FUTURO
Luego aceptó un nuevo empleo, pero ciertas dificultades en el país impidieron que continuara, y eso lo hizo dudar de si en verdad podía construir su futuro en Guatemala, “trabajé como promotor de ventas por dos años, me gustaba eso”.
Su familia, que en su mayoría vive en Estados Unidos, le habló y le dijo que sería mejor si migraba a ese país y trataba de salir adelante allá, “por todas las oportunidades que hay decidí venirme”.
HAY OPORTUNIDADES, PERO TAMBIÉN DIFICULTADES A SUPERAR
En Guatemala cuenta que ya no quedaron muchos familiares directos y su mamá falleció mientras él se encontraba allá, así que ya no pudo reencontrarse con ella y eso para él es un sentimiento que lo acompaña con mucho dolor.
“Este es un país hermoso y no se vacila en decir que este es un país de las oportunidades, pero hay muchas dificultades, primero una cultura diferente, idioma diferente, muchas veces problemas de racismo y vienen de la gente de la región”, refirió.
Vivir en Estados Unidos es una experiencia diferente a Guatemala, porque allá el trabajo es lo primordial y esto absorbe el tiempo, “es complicado aparte que a uno lo afecta la nostalgia, porque se deja el país y la familia y venir acá y adaptarse es un tanto difícil”.
HA TRABAJADO EN LA CONSTRUCCIÓN, EN RESTAURANTES, EN EL CAMPO, COMO JARDINERO Y AHORA EN UNA BODEGA
Fernando menciona que el idioma en su caso no ha sido complicado, porque ha tratado de estudiar y eso ha sido muy importante.
“Este país es bendito, de oportunidades, entonces yo empecé trabajando en la construcción como por dos años cuando llegué luego de eso vine a vivir a Los Ángeles y me moví a Washington State a vivir con mi papá, estuve viviendo como por tres años, lo ayudaba a él y trabajaba en la construcción, pero con la recesión eso bajó”, explicó.
Dado que ese trabajo no rindió igual, el guatemalteco se dedicó en el campo a la siembra de cherrys, “trabajé en un restaurante haciendo hamburguesas, trabajé como mesero en un restaurante y algunos días de jardinero, luego estuve trabajando en una imprenta, en una bodega de shipping y en eso sigo”.
El guatemalteco detalló que estando en ese país se aprende a valorar todo porque al final sino se trabaja no se puede vivir y tampoco darse sus gustos o aportar al hogar, “ahora tengo como ocho o nueve años de trabajar en bodegas”.
ESPERA LA LLEGADA DE SU TERCER HIJO
Fernando explica que su familia lo ayudó cuando llegó y ahora él con sus propios medios busca salir adelante, “mantengo una buena relación con mis hermanos, vamos formando camino y poco a poco tratando de plantearnos nuevas metas”.
Cuenta que hasta ahora trata de dedicarse a sus hijos, compartir al máximo su tiempo con ellos, antes jugaba fútbol, pero ante el temor de una lesión se apartó. Relató con mucha emoción que este miércoles 17 de agosto esperaba la llegada de su tercer hijo y se sentía feliz y muy nervioso, pero siempre confiado en que Dios los protegerá tanto a su esposa como al bebé.
Aunque sueña con el día que pueda volver a Guatemala, Fernando dice que por ahora su vida está en Estados Unidos junto a su familia, “regresar a vivir a Guatemala es un poco difícil, pero tengo muchos sueños aquí y es lo bonito de este país y no importa si está regular o irregular”.
Su comida favorita es el pepián, “mi mamá lo hacía y también con tamalitos blancos, las esposas de mis hermanos cocinan muy rico y así nos invitan a comer”.
Fernando le envía un saludo a los guatemaltecos que se encuentran en EE. UU., y los invita a siempre seguir las leyes en ese lugar, a no actuar de una manera incorrecta, porque la clave del éxito afirmó que es el actuar de manera correcta.