Los migrantes guatemaltecos son un pilar económico crucial para las familias en el país. Envían remesas que alcanzan los US$500 mensuales por persona, la cifra más alta entre los centroamericanos, según la Encuesta sobre Migración Internacional de Personas Guatemaltecas y Remesas 2022, elaborada por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Este dinero es fundamental para mantener a flote a miles de hogares y a la economía nacional. En muchos casos, estos envíos no solo complementan los ingresos familiares, sino también son esenciales para cubrir necesidades básicas, de acuerdo con el informe.
Esta tendencia se refleja en los datos oficiales emitidos por el Banco de Guatemala (Banguat), que muestran que las remesas alcanzaron los US$1 mil 819 millones en julio de 2024. Un aumento en comparación con el mismo mes del año anterior, cuando totalizaron US$1 mil 642.9 millones. También superó los ingresos registrados en junio de 2024, que se situaron en US$1 mil 760.6 millones.
En términos acumulados, los ingresos por remesas de enero a julio de 2024 suman US$12 mil 090.4 millones, equivalente a un crecimiento del 7 por ciento, que refleja una tendencia positiva respecto de los US$11 mil 300.9 millones acumulados en el mismo periodo de 2023.
Durante ese año, el ingreso por remesas mostró una fluctuación marcada, con un incremento en mayo de 2023 (US$1 mil 811.9 millones), pero seguido por una disminución en julio. El año finalizó con un ingreso de divisas por US$19 mil 804 millones.
CRECIMIENTO DE LAS REMESAS
Johny Gramajo, gerente económico del Banco de Guatemala (Banguat), explicó que en 2024 proyectan que las remesas familiares crecerán entre un 8 y 9 por ciento y en 2025 un 6 y 7 por ciento.
Este cambio en la tasa de crecimiento ya comenzó a observarse el año pasado, pero se ha hecho más evidente en 2024. Aunque la tasa de crecimiento se reducirá gradualmente cada año, se mantendrá importante el flujo de remesas, explica el funcionario.
Gramajo agregó que “la presencia de más guatemaltecos en Estados Unidos impulsó mayores ingresos, especialmente porque el mercado laboral ha sido sólido durante los últimos años. Hasta julio, mostró fortaleza durante cuatro años consecutivos, especialmente en los últimos tres. Antes, muchos compatriotas trabajaban en la construcción o en la agricultura, pero ahora vemos guatemaltecos empleados en hotelería, restaurantes, telecomunicaciones y otros servicios, lo que ha diversificado sus oportunidades laborales”.
Añadió que “esta diversificación también explica el aumento en el envío de remesas, en parte debido al temor a ser deportados, dado el endurecimiento de las políticas migratorias. Otro factor es generacional, dado que la migración guatemalteca es caracterizada por ser relativamente joven. A diferencia de otros migrantes, muchos guatemaltecos no tienen la intención de establecerse permanentemente en Estados Unidos. Por ejemplo, son pocos los que compran viviendas allí, ya que la mayoría planea regresar a Guatemala”.
“A pesar de estos factores, las remesas tienen un límite. Por ejemplo, si un migrante gana $5 mil y destina el 20 por ciento a su familia, en 10 años podría ganar $10 mil y seguir enviando el 20 por ciento. Aunque el monto absoluto aumenta», explica el gerente económico del Banguat.
Agregó que «el crecimiento del ingreso no es exponencial, y eventualmente se estabiliza. Actualmente, los migrantes guatemaltecos destinan alrededor de un 13 por ciento de sus ingresos a las remesas, según datos del Banco Mundial, el BID, CEMLA y otros organismos internacionales. Lo que estamos viendo es un estancamiento del crecimiento, aunque el flujo en dólares continuará aumentando”.
“Este fenómeno es natural, una vez que el ingreso alcanza un punto alto, es difícil que siga creciendo a las mismas tasas, a menos que haya una expansión económica significativa en Estados Unidos», argumentó Gramajo.
Aunque la tasa de crecimiento disminuya, afirmó, el volumen seguirá siendo significativo. «Nuestras proyecciones indican que las remesas continuarán creciendo, aunque a un ritmo menor. No vemos un escenario en el que las remesas se contraigan. Aunque el crecimiento se ralentice, el monto total seguirá siendo elevado, reflejando un ciclo natural en el flujo de remesas”, finalizó Gramajo.
GUATEMALTECOS EN EL EXTERIOR
Según el informe elaborado por la OIM alrededor de 2 millones 141 mil 401 personas guatemaltecas envían remesas hacia Guatemala. La mayor parte de estas son originarias de:
- Guatemala (19.8%)
- San Marcos (9.2%)
- Huehuetenango (9.0%)
- Quetzaltenango (8.5%).
- Escuintla (5.0%)
- Jutiapa (4.6%)
- Alta Verapaz (4.3%)
- Quiché (4.3%).
También identificó que el 97.3 por ciento (1 millón 995 mil 907) de los guatemaltecos residen en los Estados Unidos, el 2.7 por ciento restante corresponde a otros países del mundo (México, Canadá, España, países de la región centroamericana).
PAÍS DE PROCEDENCIA DE LA TRANSFERENCIA
La encuesta publicada por la OIM revela que el 65.2 por ciento de las personas guatemaltecas remitentes de remesas y que radican en Estados Unidos se localiza en seis estados de ese país:
California con 545 mil 790 migrantes, absorbiendo el 27.3% de la población guatemalteca. Las principales ciudades de residencia en California son Los Ángeles y San Francisco (18.3% y 6.2%, respectivamente). De acuerdo con el informe, la cantidad de personas viviendo en California se asemeja al total de población que reside en el departamento de Jutiapa (558 mil 195 habitantes en 2022).
En segundo lugar, está Nueva York, con una población guatemalteca de 271 mil 566 personas, equivalente al 13.6 por ciento del total de guatemaltecos que radican en los Estados Unidos. En tercer lugar, se encuentran 176 mil 650 (8.9%) personas guatemaltecas que residen en el estado de Florida, principalmente en la ciudad de Miami (8.5%).
Según la OIM la presencia de un 40.9% de guatemaltecos en los estados de California y Nueva York es explicable, ya que ambos son santuarios.
