El Instituto Nacional de Estadística (INE) actualizó la metodología para calcular el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA). Este costo calculado ahora reflejará los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2022-2023.
La primera publicación realizada con el nuevo método de cálculo se realizará el 15 de febrero.
¿QUÉ COMPONE AHORA LA CANASTA BÁSICA?
«Entre las novedades más destacadas se encuentran la inclusión de alimentos que han ganado relevancia en la alimentación cotidiana», afirma el INE, «así como actualizaciones en las cantidades para reflejar las porciones más realistas y actuales».
«Dentro de los productos nuevos podemos destacar: los cereales en bolsa o en caja, los jugos de fruta, la yuca, zanahoria, ejote, pepino, chile pimiento, el pescado (solo para área rural), lechuga y las galletas, entre otros. La CBA actualizada proporcionará una visión más precisa de los costos asociados con la adquisición de alimentos esenciales».
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CONDICIONES TOMADAS EN CUENTA
Según el informe emitido por el INE, «el criterio utilizado para la dimensión de la vivienda fue la máxima carencia de los materiales de la vivienda que se define para los hogares que experimentan privación en al menos una de las tres condiciones siguientes»:
- Piso
- Techo
- Pared
«Esta elección se fundamentó en la observación de que la máxima carencia de los materiales presenta la mayor correlación con los quintiles móviles del ingreso de la población con respecto a los otros dos criterios», dicen.
En cuanto a servicios básicos, el INE afirmó que «se empleó como criterio la carencia de saneamiento, la cual se define para aquellos hogares que carecen de servicio de drenaje y no disponen de servicio sanitario, o bien, utilizan letrinas o pozos ciegos».
«La elección de este criterio se basa en su alta correlación con los quintiles móviles del ingreso de la población, en comparación con el criterio de la carencia en fuentes de agua», dicen.
«En la dimensión de educación, se han considerado como carentes aquellos casos en los que al menos un integrante del hogar cuya edad se encuentre entre los rangos de estudio obligatorio que son de entre 7 a 15 años de edad y no se inscribió en el presente año escolar», agregan.
Para establecer aquello que se considera como carencia en la dimensión de alimentación «se seleccionó el criterio de participación del gasto alimentario en el gasto total debido a que tiene mayor relación con los ingresos de los diferentes hogares. En este criterio se considera carente si un hogar destina más del 75% de su presupuesto a la compra de alimentos», según el Instituto.
«En el criterio de ingesta calórica, se consideró carente a los hogares del área urbana cuya ingesta calórica por persona fue inferior al requerimiento promedio de 2,101 kilocalorías por día, y para los hogares del área rural, aquellos cuya ingesta calórica por persona fue inferior al requerimiento promedio de 2,053 kilocalorías por día», finalizan.
¿POR QUÉ SE ACTUALIZÓ EL MÉTODO?
«La actualización de la Canasta Básica Alimentaria es esencial para garantizar que el indicador sea representativo de la realidad económica y social del país», aseguran.
«En ese sentido, el INE reconoce la importancia de mantener actualizada esta herramienta fundamental. Para garantizar el proceso y su transparencia, el INE llevó a cabo talleres para dar a conocer la metodología y el 12 de diciembre recién pasado, presentó los resultados preliminares», agregan.
El INE puntualizó que la actualización de la Canasta Básica Alimentaria es el resultado de un, «exhaustivo análisis de los patrones de consumo actuales, incorporando cambios en las preferencias alimentarias, nuevos productos en el mercado, la oferta de los mismos y actualización en las porciones según los consumos habituales de los hogares». Comentan que, durante el proceso, obtuvieron la colaboración y asesoría técnica de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
