La limpieza y la organización en tu hogar reflejan un ambiente fresco y armonioso, por el contrario, el exceso de platos en el lavadero, la suciedad de la cocina y la montaña de ropa que debes organizar generan ansiedad e incluso para algunas personas pereza, ¿has enfrentado esta situación?
Muchas veces por la falta de tiempo, el orden del hogar pasa a segundo plano, sin embargo, es importante tomar tiempo para que luzca impecable.
Un hogar ordenado es sinónimo de armonía y bienestar, no se puede negar la sensación de tranquilidad una vez que se ha dedicado tiempo a ordenar y organizar ya sea el closet, cocina, alacena, refrigerador, etc.
¿CUÁL ES EL IMPACTO DEL ORDEN EN LA VIDA COTIDIANA?
El orden y limpieza es el reflejo de lo que hay en el interior del ser mismo, tanto en la vida cotidiana, personal y laboral. El orden físico genera paz interior, por lo que una casa ordenada transmite mayor sensación de bienestar y comodidad, es el reflejo de cómo te sientes.
Para que tu hogar luzca impecable y que no solo una persona lleve la carga de la limpieza, es mejor establecer rutinas.
Uno de los retos más grandes de las familias radica en establecer reglas cómodas y eficaces que mantengan un buen equilibrio entre el desorden y la confusión que pueden ocurrir si no se establecen.
Como padre de familia examina las rutinas de tu hogar para cerciorarte que se cumplan conforme deseas. Recuerda que debe ser un trabajo en equipo en donde todos participen y se distribuyan las tareas del hogar por igual.
¿EN BUSCA DE TIPS?
En LH Bienestar te proponemos algunas reglas básicas para mantener el orden en tu hogar:
Realiza en el momento aquellas tareas que pueden ser completadas en menos de 2 minutos.
La “regla de los 5 minutos” te incita a seguir trabajando en una tarea hasta resolverla por completo.
Si tu problema es la acumulación, no dejes entrar nuevas tareas hasta concluir las que ya asumiste.
Por ejemplo, si eres amante de las compras y tienes un closet lleno de ropa que no usas, debes seleccionar la ropa en buen estado que deseas descartar y donarla, de esa forma estás ayudando a optimizar el uso de las prendas y a la vez organizando tu closet.
Elimina de tu vida todo aquello que hace más de un año que no utilizas. No te excuses en decir que pronto lo utilizarás, probablemente alguien más le puede dar un mejor uso.
Toca sólo una vez las cosas y no las dejes hasta que las devuelvas al sitio adecuado.
Si ensucias algo lávalo, porque si lo dejas para después, se puede acumular aún más la tarea. Una vez seco colócalo en su lugar.
Recuerda designar un lugar específico para cada cosa.