TOKIO/AP
El gobierno de Japón tomó nuevas medidas para el control del coronavirus el jueves en Osaka y otras dos zonas donde está aumentado el contagio apenas cuatro meses antes de los Juegos Olímpicos de Tokio.
Osaka, la vecina Hyogo y Miyagi en el norte han registrado fuertes aumentos de los casos diarios desde principios de marzo, poco después de que Japón mitigó un estado de emergencia parcial y no vinculante que comenzó en enero. El 21 de marzo se levantó el estado de emergencia en Tokio, anulando las medidas que apuntaban a frenar la transmisión del coronavirus y aliviar la presión sobre las instalaciones médicas que tratan a enfermos de COVID-19.
Los expertos han expresado preocupación por el pico en Osaka —con muchos casos vinculados con nuevas variantes británicas del virus— y el peso que significa para la salud pública.
En una reunión de la comisión del gobierno el jueves, el primer ministro Yoshihide Suga decretó el estado de preemergencia en las tres prefecturas bajo una nueva ley de prevención que entrará en vigencia el lunes. La medida se extiende hasta el 5 de mayo, cuando finaliza la “Semana de Oro” de las vacaciones de primavera.
“La intención de la medida es impedir que se transmitan las infecciones para no tener que decretar otro estado de emergencia”, dijo Suga.
Para el 15 al 18 de abril está previsto un campeonato internacional de patinaje artístico en Osaka con la participación de competidores de cinco países. El paso de la antorcha olímpica por la ciudad ocurrirá dentro de dos semanas.
“Personalmente creo que se debería cancelar el paso de la antorcha olímpica por la ciudad de Osaka”, dijo el gobernador Hirofumi Yoshimura. Sostuvo que más importante que el evento son las medidas de prevención como el distanciamiento social y evitar las salidas no esenciales. En otras partes de la prefectura de Osaka se realizará el paso de la antorcha como está previsto.
Los organizadores del relevo han pedido a la gente que respete la distancia social, use mascarillas y se abstenga de gritar al paso de los corredores. Han dicho que cancelarán o desviar tramos en caso de necesidad.