Manifestantes sostienen una pancarta que dice “¿Menos de dos comidas al día es normal?” durante una protesta para exigir la entrega de asistencia alimentaria a las personas afectadas económicamente por la pandemia y contra la respuesta del gobierno a la pandemia en Sao Paulo, Brasil. Foto: Vía AP

SAO PAULO/AP

El gobernador de Sao Paulo, João Doria, dijo el viernes que solicitará la aprobación federal para ensayos clínicos de fase 1 y 2 de la primera vacuna brasileña contra el nuevo coronavirus.

Doria afirmó en conferencia de prensa que el Instituto Butantan, ubicado en su estado, ha concluido de manera prometedora los ensayos realizados en animales en India, y que podría entregar las dosis en julio, a la espera del aval de la autoridad sanitaria de Brasil. Doria espera que las pruebas comiencen el mes entrante en el país, mientras que Vietnam y Tailandia participarán como socios en un consorcio.

El director de Butantan, Dimas Covas, dijo que mediante las pruebas se determinará si la vacuna candidata consistirá de dos dosis o de una sola. La llamada vacuna Butanvac se basa en las vacunas contra la influenza que ya produce el instituto estatal y que será mucho más barata que otras desarrolladas recientemente.

“Estamos hablando de una segunda generación de vacunas contra el coronavirus”, aseveró Covas. “Ahora que sabemos cuál vacuna es buena contra el COVID. Esta incorpora algunos cambios y será más inmunogénica. Utilizaremos dosis más pequeñas por persona”.

Butantan produce cada año más de 80 millones de vacunas contra la influenza para los brasileños, y podría incrementar su producción a 100 millones de dosis contra el coronavirus por año, según Covas. La Butanvac es una de las miles de vacunas que están en desarrollo en el mundo, pero es la primera de Brasil para la que se han solicitado las pruebas.

El gobernador señaló que el estado de Sao Paulo financiará el desarrollo de la vacuna, lo cual pone de relieve las desavenencias que él y el presidente Jair Bolsonaro han tenido durante la pandemia.

Bolsonaro ha restado importancia a los riegos que representa la enfermedad, y durante meses ha puesto en duda la eficacia de la vacuna de la compañía biofarmacéutica china Sinovac que fue adquirida por Doria. El Ministerio de Salud de Brasil finalmente la compró al Instituto Butantan cuando no tenía opciones disponibles.

Doria dijo que hasta 40 millones de vacunas Butanvac podrían estar listas para fines de año.

No fue sino hasta hace poco que Bolsonaro cambió parcialmente de rumbo sobre las vacunas debido a presiones políticas en un país donde más de 300.000 personas han muerto a causa del virus.

“El Ministerio de Salud se está enterando de esta vacuna al mismo tiempo que ustedes”, declaró Covas.

Si las autoridades de Brasil aprueban el inicio de las pruebas de Butanvac, será la segunda vacuna contra el COVID que se desarrolla nacionalmente en América Latina. El gobierno cubano dijo el domingo que su vacuna Soberana 2 se encuentra en la fase final de ensayos clínicos. La semana pasada, Cuba aprobó una segunda vacuna candidata para pruebas clínicas llamada Abdala.

Artículo anteriorFuerza de Tarea de EE. UU. buscará “moverse rápido” contra la Corrupción
Artículo siguienteHarris no planea visitar pronto la frontera con México