Por ARITZ PARRA
MADRID
Agencia AP
Un partido ultraderechista obtuvo un importante avance en una elección regional en España: un fuerte revés para el gobernante Partido Socialista, al que pertenece el presidente de gobierno Pedro Sánchez, quien declaró que defenderá la democracia contra el miedo.
El partido antiinmigrante, antifeminista y euroescéptico Vox logró ayer 12 escaños en el Parlamento regional de 109 miembros en Andalucía, la región más poblada de España y bastión socialista desde hace 36 años.
El Vox, fundado hace cuatro años y que no había ganado bancas en España, podría tener en sus manos la llave del futuro gobierno andaluz y expulsar a los socialistas si forma alianza con los partidos centroderechista y conservador para alcanzar una mayoría de 59 escaños.
Los dirigentes de éstos iniciaron conversaciones hoy para formar un gobierno regional y ambos partidos dijeron que tendrán contacto con Vox.
La sorpresiva victoria _ya que las encuestas más favorables daban a Vox apenas cinco bancas_ reforzó la estrategia del partido de dejar su huella en la política nacional y en las elecciones europeas del año próximo. También es un revés para quienes creían que el recuerdo amargo de la dictadura franquista y el consenso sobre los beneficios de la Unión Europea habían vacunado al país contra la ola populista en auge en Europa.
La dirigente ultraderechista francesa Marine Le Pen fue una de las primeras en felicitar a Vox y su dirigente nacional Santiago Abascal por lo que calificó de «resultado muy significativo para un movimiento joven y dinámico».
En contraste, Sánchez sostuvo que el resultado «fortalece nuestro compromiso de defender la Constitución y la democracia contra el miedo».
Los socialistas obtuvieron apenas 33 bancas, comparado con 47 en 2015 y lejos de la mayoría de 55 necesaria para gobernar, aunque tuvieran el apoyo de Adelante Andalucía, la filial local del partido antisistema Podemos, que obtuvo 17 bancas.
El conservador Partido Popular obtuvo 26 bancas y el Ciudadanos de centroderecha duplicó con creces su presencia al ganar 21.
Según algunos analistas, una alianza de la derecha con la ultraderecha podría resultar contraproducente en vista de las elecciones locales, regionales y europeas del año próximo y una elección general que podría ser convocada en cualquier momento antes de 2020.
Es el límite del período de Sánchez, que derribó al presidente conservador Mariano Rajoy en junio con un voto de retiro de confianza. Sánchez preside el gobierno más débil en 40 años de democracia y crecen las conjeturas de que convocaría a una elección anticipada.