POR AGENCIA/AP
El Paso, Texas, EE.UU.

Los alcaldes de más de una docena de ciudades de todo Estados Unidos se congregaron en una instalación para niños migrantes en la frontera de Texas con México y exigieron que las familias que fueron separadas al llegar a la frontera sean reunificadas de inmediato.

Los alcaldes manifestaron su preocupación por el trauma que la separación familiar podría ocasionar a los menores, aun después de que el presidente Donald Trump frenó ayer esta política de separación familiar.

El alcalde de Santa Fe, Nuevo México, Alan Webber dijo que la política de tolerancia cero del presidente para detener la inmigración ilegal en la frontera con México ha traumado a niños y sigue siendo una amenaza humanitaria.

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