Lima
DPA
El exmandatario peruano Alberto Fujimori (1990-2000), condenado por delitos de lesa humanidad, agradeció hoy al presidente Pedro Pablo Kuczynski por concederle el indulto 15 años antes de cumplir su sentencia y pidió perdón a los «compatriotas» que defraudó cuando era gobernante.
«(El indulto) me ha producido un fuerte impacto en el que se mezclan sentimientos de extrema alegría y al mismo tiempo pesares. Soy consciente de que los resultados durante mi Gobierno fueron bien recibidos de una parte, pero reconozco que he defraudado a otros compatriotas. A ellos les pido perdón de todo corazón», dijo Fujimori en un video publicado en Twitter.
«No puedo dejar de expresar mi profunda gratitud por el paso complejo que ha tomado el presidente, que me compromete a su vez en esta nueva etapa que se abre en mi vida para apoyar decididamente su llamado a la reconciliación», agregó Fujimori desde la clínica donde fue internado el sábado.
El exmandatario, de 79 años, recibió en víspera de la Navidad el indulto humanitario cuando le faltaba cumplir 15 de 25 años de cárcel como autor mediato de 25 asesinatos y dos secuestros agravados cometidos durante su Gobierno.
«Creo que una persona que solicita un indulto tiene que pedir perdón a las víctimas, a los familiares de quienes hoy no están», afirmó la parlamentaria izquierdista Marisa Glave sobre el mensaje.
Parte de la población, que recuerda con cariño a Fujimori, celebra la decisión de Kuczynski. El resto de la gente repudia la liberación anticipada del exmandatario, en cuyo Gobierno campearon la corrupción y las violaciones a los derechos humanos.
El rechazo contra el indulto se debe a que éste se dio cuando circulaban versiones de una «negociación» entre Kuczynski y el hijo menor de Fujimori, el parlamentario Kenji Fujimori, quien salvó al presidente de una destitución por «incapacidad moral permanente».
Gran parte de los peruanos también se oponen al indulto después de que reconocidos médicos consideraran que los males de Fujimori son normales en personas de su edad y no impiden que cumpla su condena.
El malestar generó que en la Navidad más de 3 mil personas protestaran en diversos lugares de Lima, incluido el exterior de la clínica donde el exmandatario permanece internado. «Por justicia y dignidad, Fujimori nunca más», arengaban los manifestantes.
Con la ayuda de un abogado especializado, los familiares de las víctimas de las masacres por las que Fujimori fue condenado presentarán el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, con la esperanza de que el ente supranacional imponga su criterio.
