POR AGENCIAS/DPA/AP
Washington

El exasesor de seguridad nacional de la Casa Blanca Michael Flynn se declaró culpable hoy de hacer declaraciones falsas al FBI en relación con las investigaciones de una presunta intromisión rusa en las elecciones presidenciales estadounidenses, informaron hoy los medios en Washington.

Flynn, un general retirado, fue criticado en su momento por sus contactos con Rusia y se vio obligado a dimitir 25 días después de haber asumido en cargo de asesor del presidente Donald Trump.

El exasesor dijo que funcionarios de Trump dirigieron sus contactos con rusos durante transición.  Además, acordó cooperar con la investigación sobre injerencia rusa.

El exasesor de seguridad nacional es acusado de haber mentido en sus declaraciones ante el FBI (Buró Federal de Investigaciones), pocos días después de la toma de posesión de Trump el pasado 20 de enero, sobre su conversación con el entonces embajador de Rusia en Washington, Serguei Kisliak, el 29 de diciembre de 2016, acerca de las sanciones impuestas por Estados Unidos a Rusia.

Al principio, Flynn incluso había mantenido en secreto su encuentro con Kisliak, que tuvo lugar después de la victoria electoral de Trump y antes del traspaso del poder al nuevo presidente estadounidense.

Flynn llegó a un tribunal federal de Washington poco antes de las 10:30 am (15:30 GMT).

El general retirado fue un asesor clave para Trump durante la campaña electoral del candidato republicano. Renunció como asesor de seguridad nacional del nuevo presidente tras admitir que había entregado, «sin darse cuenta», «información incompleta» a destacados funcionarios de la Casa Blanca sobre su conversación con el embajador ruso.

Flynn es la cuarta persona asociada a Trump en ser acusada en el marco de la investigación liderada por el exdirector del FBI Robert Mueller.

El excolaborador de Trump George Papadopoulos confesó el 30 de octubre que había mentido anhte el FBI sobre sus contactos con Rusia. Además, el exjefe de la campaña electoral de Trump, Paul Manafort, y su socio, Ricahrd Gates, fueron acusados de conspiración, lavado de dinero y violación de las leyes del lobby relacionados con el antiguo trabajo de lobby de Manafort con un partido prorruso en Ucrania.

Artículo anteriorTrump reitera su condena al fallo que absolvió a un mexicano
Artículo siguienteLo que fue noticia durante la semana