Al Raqqa
DPA
Más de 220 civiles perdieron la vida en las últimas cuatro semanas en Al Raqqa, el bastión de la milicia terrorista Estado Islámico (EI) en el norte de Siria, indicó hoy el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Según los activistas, hay casi 40 niños entre los fallecidos. Además, más de 300 extremistas y más de 100 atacantes murieron en el mismo período en la ofensiva de la alianza dirigida por los kurdos contra el EI.
Las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) iniciaron hace cuatro semanas una ofensiva en el centro de Al Raqqa y ya han llegado hasta el casco antiguo, aunque avanzan muy lentamente. Según la ONU, decenas de miles de personas han huido de los enfrentamientos.
El EI también está cerca de perder su bastión iraquí de Mosul. Allí, la milicia terrorista controla ya apenas unos pocos barrios del casco antiguo. Tanto en Al Raqqa como en Mosul, la coalición internacional apoya desde el aire la ofensiva contra el EI.
