Estambul
DPA
Un fiscal de Turquía presentó hoy una acusación contra el clérigo islámico Fethullah Gülen alegando que el FBI y la CIA de Estados Unidos ayudaron a capacitar a miembros de su movimiento para realizar el fallido intento de golpe de Estado el 15 de julio.
Pocos días después del fracasado golpe en Turquía circularon rumores de que Washington, aliado clave de Ankara en la OTAN, tuvo algún tipo de participación en su planificación.
Las acusaciones, formuladas en varios medios de comunicación e incluso por el ministro de Trabajo turco, no fueron respaldadas por evidencias concretas pero han ganado fuerza en Turquía.
Una acusación presentada hoy en la ciudad noroccidental de Edirne y dada a conocer por la agencia de noticias estatal Anadolu señala que la agencia de inteligencia de Estados Unidos (CIA) y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) proporcionaron formación en «centros culturales» a los seguidores del predicador islámico Gülen.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y varios grupos de la oposición de Turquía culpan a Gülen, quien reside en el estado de Pensilvania en un exilio autoimpuesto, de ser el instigador del golpe de Estado de este mes.
Afirman que el clérigo islámico, un ex aliado de Erdogan pero con quien ahora mantiene una gran rivalidad, pretende derrocar al Gobierno turco y gestionar un «Estado paralelo». Erdogan lo acusa de liderar una «organización terrorista» y emitió una orden de arresto contra Gülen y su extradición de Estados Unidos.
El movimiento de Gülen tiene una amplia red de instituciones educativas en todo el mundo, incluyendo una red de escuelas autónomas en Estados Unidos.
Washington rechazó repetidas veces las acusaciones de ser reponsable de los hechos ocurridos durante el fallido golpe, que dejaron más de 260 muertos y llevaron a purgas de amplio alcance que afectaron a miles de funcionarios públicos por su presunta conexión con Gülen.
«El Gobierno de Estados Unidos no lideró, apoyó o sabía algo del golpe», dijo categóricamente la semana pasada el embajador estadounidense John Bas a la televisión turca.
El Estado Mayor Conjunto calificó de «absurda» la acusación de que el ex comandante en jefe de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán, John Campbell, fuese un golpista.
El diario «Yeni Safak», cercano al presidente Erdogan, aseguró en un artículo titulado «El comandante estadounidense Campbell: El hombre detrás del fallido golpe de Estado en Turquía» que el militar había recibido 2.000 millones de dólares a través de una cuenta bancaria nigeriana para financiar el golpe.
«Es un amigo personal y sé que ahora está haciendo muchas cosas y una de ellas no es la planificación de un golpe en Turquía», dijo el general Joseph Dunford el lunes en una conferencia de prensa con el secretario de Defensa norteamericano, Ash Carter. «Realmente no sé de dónde podría haber venido esa información,» añadió Dunford.
Estados Unidos comparte una base aérea en Incirlik en el sur de Turquía, donde se realizan operativos contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y donde, según algunas fuentes, también se almacenan armas nucleares.
Aaron Stone, un analista de Turquía, describió la serie de artículos en Yeni Safak contra Campbell como una «locura vergonzosa.»
«La instrumentalización de una postura antiamericana para intentar desviar las críticas tras el golpe ha sido increíblemente dañina pero exitosa», escribió en su cuenta de Twitter.