CINCINNATI, Ohio, EE.UU.
AP

Defensores de los animales están organizando una vigilia especial para un gorila que tuvo que ser sacrificado en el zoológico de Cincinnati para rescatar a un niño de 4 años se metió al foso de los primates.

Anthony Seta dijo que la muerte del gorila de 17 años es una «tragedia sin sentido». Agregó que la vigilia se realizará hoy y es una forma de recordar a Harambe.

En redes sociales ha habido una fuerte reacción por la forma como el niño logró entrar al foso y por la decisión de matar al gorila. La página en Facebook «Justicia para Harambe» ha atraído bastante atención desde el sábado que ocurrió el incidente.

Seta dijo que la vigilia es una forma de honrar al gorila, no para señalar a los padres del niño. El menor y su familia, cuyo nombre no se ha dado a conocer, ya se encuentran bien en su casa.

Las personas que visitaban el zoológico de Cincinnati observaban impotentes mientras gritaban «¡quédate tranquilo!» y una mujer exclamaba «¡Mami te ama!» mientras un gorila se acercaba a un niño de 4 años que cayó al foso de los primates.

El niño, todavía en el agua, miraba hacia arriba mientras el animal le tocaba la mano y la espalda. En un momento parecía que Harambe, de 181 kilos (400 libras), ayudaba al menor a levantarse.

Dos testigos pensaron que el gorila estaba tratando de proteger al niño antes de espantarse con la gente que gritaba. El animal entonces se lo llevó cargando y lo llevó a otro punto dentro de la zona de exhibición, dijeron autoridades del zoológico.

Temiendo por la vida del menor, el personal del zoológico decidió dispararle al gorila de 17 años.

Autoridades del centro dijeron que el pequeño cayó tras trepar la valla de la muestra Gorilla World el sábado por la tarde. El gorila lo recogió y arrastró durante aproximadamente 10 minutos.

El director del zoológico, Thane Maynard, dijo que el equipo de respuesta para animales peligrosos del parque, capacitado para hacer frente a este tipo de incidentes, decidió que el niño estaba «en una situación que ponía en peligro su vida» y que necesitaban matar a Harambe.

«Tomaron una decisión difícil e hicieron lo correcto porque salvaron la vida del pequeño niño», dijo Maynard. «Pudo haber sido muy malo».

Pero lamentó la muerte de Harambe, que llegó a Cincinnati en 2015 procedente del Zoológico Gladys Porter en Brownsville, Texas.

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