BERLÍN
AP

El gobierno de Alemania calcula gastar 93 mil 600 millones de euros (106 mil 200 millones de dólares) para apoyar a refugiados en los próximos años, reportó el sábado el semanario alemán Der Spiegel.

La revista con sede en Hamburgo citó un documento del Ministerio de Finanzas donde prevé que el costo anual se elevará de unos 16 mil 100 millones de euros este año a 20 mil 400 millones en el 2020.

Gran parte del dinero se destinará a servicios básicos, apoyo para vivienda y cursos de idiomas para los solicitantes de asilo. Pero otra partida importante se destinará para combatir los motivos por los cuales esas personas huyen de sus países y buscan refugio en Alemania.

El vocero del ministro de Finanzas, Juerg Weissgerber, no quiso comentar sobre las cifras, pero confirmó que las autoridades federales estaban en conversaciones con representantes de los 16 estados alemanes sobre el costo de manutención de los refugiados. Las autoridades buscan un acuerdo para poder compartir los gastos para cuando la canciller Angela Merkel se reúna con los líderes estatales el 31 de mayo.

En meses recientes el fuerte gasto gubernamental en refugiados ha impulsado la economía alemana, pero también ha causado resentimiento entre algunos alemanes que creen que los migrantes reciben trato preferencial. La popularidad de un partido nacionalista, Alternativa para Alemania, ha subido en encuestas recientes y el número de ataques contra refugiados se ha elevado en el último año.

Casi 1,1 millones de solicitantes de asilo entraron a Alemania el año pasado, aunque el gobierno ha señalado que la cifra no incluye a aquellos que siguen su camino o regresan a su país.

Según Der Spiegel, el Ministerio de Finanzas calcula que 600 mil refugiados llegarán al país este año, 400 mil en 2017 y 300 mil para los años siguientes. Asume que la mitad de aquellos que sean oficialmente reconocidos como refugiados encontrarán trabajo en cinco años.

La cifra surge de un borrador elaborado por el Ministerio de Finanzas para negociar partidas con los estados federados. Incluye gastos en acogida e integración, pero también en medidas para combatir las causas de la huida en los países de origen, detalló la revista.

Los datos se conocen en medio de una creciente tensión social y política en Alemania por la ola de más de un millón de refugiados que llegaron al país el año pasado, los desafíos que plantea su acogida y los sentimientos xenófobos que intentan agitar diversos sectores.

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