MADRID
AP

El ministro español del Interior, Jorge Fernandez Díaz, defendió el viernes su reunión del mes pasado con el ex director gerente del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, para discutir preocupaciones de seguridad luego de que este — que está siendo investigado por sospechas de fraude y lavado de dinero — recibiese amenazas, fundamentalmente en medios sociales.

Respondiendo a un aluvión de críticas por recibir a Rato en el ministerio en un encuentro del que no se informó, Fernández Díaz dijo en comisión parlamentaria que durante el encuentro no se habló de la situación judicial del ex mandatario.

Su reunión se hizo pública cuando el diario El Mundo publicó la exclusiva. La principal formación de la oposición, el Partido Socialista, ha pedido a la fiscalía que investigue si Fernandez Diaz quebrantó las leyes al citarse con Rato.

Fernandez Diaz criticó esta iniciativa. Durante su comparecencia en la comisión dijo que los dos hablaron de los cientos de amenazas hacia Rato y su familia recibidas en medios sociales tras su detención en abril, en un publicitado registro en su vivienda y despacho por parte de agentes de Hacienda que investigaban un supuesto fraude fiscal y lavado de dinero.

Rato cuenta con escolta oficial, financiada por el gobierno, por sus años como vicepresidente del ejecutivo. Fernández Díaz dijo que su labor como máximo responsable de seguridad del país es reunirse con Rato tras su petición para un encuentro.

Agregó que el político, que presidió el FMI entre 2004 y 2007, es una figura clave de los gobiernos del Partido Popular. Rato ocupó la cartera de Economía en el ejecutivo de José María Aznar, entre 1996 y 2004, y entonces era visto como su posible sucesor.

La investigación en torno a Rato deriva de sus años como director ejecutivo del banco español Bankia.

Renunció a su posición en la entidad en 2012, en medio de preocupaciones sobre su solvencia en el apogeo de la crisis financiera en el país. Más tarde, el banco tuvo que ser rescatado por el gobierno central.

Rato está implicado en dos investigaciones penales vinculadas a Bankia, incluyendo un escándalo por el uso inapropiado que miembros de la junta realizaron de fondos de la entidad.

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