La Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (MOE/OEA) lanzó este sábado un llamado público a las autoridades electorales de Honduras para que agilicen el escrutinio de las elecciones generales del 30 de noviembre, un proceso que permanece congelado desde hace más de 18 horas y que mantiene al país en una creciente incertidumbre política.
El organismo alertó de demoras, fallos tecnológicos y falta de pericia en la gestión del conteo, mientras el oficialismo ha solicitado incluso la anulación de los comicios.
En un comunicado difundido en Tegucigalpa, la misión, encabezada por el excanciller paraguayo Eladio Loizaga, urgió al Consejo Nacional Electoral (CNE) a acelerar el conteo “garantizando las medidas de trazabilidad que otorguen certeza en los resultados”.
La OEA señaló que sus equipos han constatado que los primeros datos confirman un resultado sumamente ajustado, lo que eleva la tensión en un proceso ya marcado por los retrasos y el desgaste tecnológico.
DEMORAS E INTERMITENCIA
La MOE detalló que mantiene una presencia ininterrumpida en el Centro Logístico Electoral y la Bodega Tecnológica, donde supervisa el conteo de actas y la gestión de materiales. Desde el domingo por la noche hasta el jueves, observó “intervalos” y hasta interrupciones en el sitio oficial de divulgación de resultados preliminares.
El organismo apuntó además que la falta de experiencia del personal en la implementación de las plataformas tecnológicas ha provocado “demoras e intermitencias” que han ralentizado de forma crítica el escrutinio.
La misión también llamó a la calma: “Es fundamental que la ciudadanía y los partidos políticos mantengan la vigilancia que la ley les confiere”, subrayó, al tiempo que pidió que las fases pendientes —incluido un volumen alto de actas sin contabilizar, el escrutinio especial y las eventuales impugnaciones— se ejecuten “con total claridad, máxima eficiencia y sin ningún tipo de retraso”.
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— OEA (@OEA_oficial) December 6, 2025
RESULTADOS PRELIMINARES SE MANTIENEN
Pese al estancamiento, los resultados continúan sin variación desde el jueves, con el 88,02% de las actas procesadas, según el CNE.
Según los últimos reportes de prensa, y el sitio oficial, se mantiene al frente el conservador Nasry Asfura, candidato del Partido Nacional y respaldado por Donald Trump, con 1.132.321 votos (40,19%). Le sigue muy de cerca Salvador Nasralla, del Partido Liberal, con 1.112.570 papeletas (39,49%). La candidata oficialista Rixi Moncada, del partido Libre, permanece relegada con el 19,30%.
La exigua distancia entre los dos primeros aspirantes ha alimentado acusaciones cruzadas de fraude. El oficialismo denunció un “golpe electoral” y pidió la nulidad de los comicios, mientras Nasralla advierte de una posible manipulación, aunque ha instado a sus seguidores a mantener la calma. Las autoridades electorales insisten en que solo proclamarán un ganador cuando finalicen el conteo y recuerdan que cuentan con hasta 30 días para declarar los resultados definitivos.
El domingo, mientras persisten las dudas sobre el escrutinio nacional, la MOE acompañará la votación municipal en San Antonio de Flores, en el fronterizo departamento de El Paraíso, donde los comicios del 30 de noviembre fueron suspendidos por irregularidades.
Honduras eligió en estas votaciones a un presidente, tres designados presidenciales, 298 alcaldes, 128 diputados locales y 20 representantes al Parlamento Centroamericano. El lento avance del conteo y las diferencias entre partidos mantienen el país en una frágil espera, mientras la OEA insiste en que el tiempo se agota y la transparencia no admite más retrasos.
