El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, ha informado este miércoles de la puesta en marcha de un grupo de trabajo para perseguir los delitos fiscales cometidos por los oligarcas y los políticos rusos, un día después de que el presidente, Joe Biden, asegurara que irían detrás de los «defraudadores» y «corruptos» que se han beneficiado del «régimen violento» de Vladimir Putin.
«El Departamento de Justicia pondrá en marcha todos sus mecanismos para incautar los activos de las personas y entidades que violen estas sanciones. No dejaremos piedra sin remover en nuestros esfuerzos por investigar, arrestar y enjuiciar a aquellos cuyos actos criminales permiten al gobierno ruso continuar con esta guerra injusta», ha enfatizado el fiscal Garland.
«Déjenme ser claro. Si violan nuestras leyes, los haremos responsables», ha insistido Garland durante la presentación del grupo de trabajo interinstitucional conocido como ‘KleptoCapture’, con el que se pretende sancionar a las élites rusas señaladas por sus negocios con el Kremlin.
‘KleptoCapture’ es un grupo de trabajo con el que se pretende aplicar con «pleno efecto» las sanciones económicas anunciadas por Washington y sus socios europeos de la OTAN en los últimos días, «diseñadas para aislar a Rusia de los mercados globales e imponer serios costes por este injustificado acto de guerra».
Los principales objetivos, remarca el comunicado del Departamento de Justicia, son «los funcionarios rusos, las élites alineadas con el Gobierno» y en definitiva, todos aquellos que se benefician de algún modo de todas estas actividades ilícitas.
Este grupo de trabajo se pondrá en marcha desde la Oficina del Fiscal General Adjunto y estará formado por personal del Departamento de Justicia encargado de delitos fiscales, así como de personal del FBI, el Servicio Secreto, o el Departamento de Seguridad Nacional, entre otros.
La fiscal general adjunta, Lisa Moreno, ha remarcado que aquellos que «refuercen» al «régimen ruso» perderán los «refugios seguros» que habían tenido hasta hora gracias a los negocios que habían mantenido con el Gobierno de Moscú.
«Oligarcas, están advertidos, utilizaremos todas las herramientas para congelar e incautar sus ganancias criminales», ha señalado Moreno, tal y como recoge el comunicado del Departamento de Justicia.