El premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa respaldó a la presidenta Dina Boluarte durante una ceremonia en la que recibió la máxima condecoración del gobierno de Perú, en medio de protestas que exigen la renuncia de la mandataria. Se trata del único apoyo de un intelectual reconocido que ha recibido la presidenta desde el inicio de su gobierno en diciembre y que ha estado afectado por manifestaciones continuas.
La reunión ocurrió la noche del martes en el palacio presidencial donde Boluarte impuso al escritor la Orden del Sol en el grado de Gran Collar. La cita no estaba en la agenda previa de la mandataria. La presidenta dijo que Vargas Llosa es «un defensor estoico de la democracia y la libertad» e indicó que la democracia debe defenderse con «armas democráticas que son las de la inteligencia y la razón».
A su vez, Vargas Llosa dijo que es una «injusticia sostener, como lo hacen algunos grupos interesados, que en el Perú se ha producido una ruptura del orden constitucional y de la democracia». El escritor ya había manifestado antes su apoyo a Boluarte El escritor peruano añadió que «algunos gobiernos de la región latinoamericana, movidos por razones ideológicas o intereses políticos, han intervenido de manera indecorosa en los asuntos peruanos… poniendo en duda la legitimidad» de la gestión de Boluarte. Se refería de forma tácita al mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien en febrero consideró a Boluarte una «presidenta espúrea». Perú y México han retirado a sus embajadores y mantienen relaciones diplomáticas a nivel de encargados de negocios.
Mario Vargas Llosa: “Me honra que las autoridades del Perú valoren mi reciente incorporación a la Academia Francesa. Como lo dije en el discurso con el que ingresé a la institución, mis principales experiencias formativas fueron con el Perú y gran parte de mi obra nace de ellas”. pic.twitter.com/oTKCqmO66U
— TVPerú Noticias (@noticias_tvperu) March 9, 2023
Boluarte asumió el poder el 7 de diciembre cuando su antecesor, el entonces presidente Pedro Castillo, fue destituido tras intentar disolver el Parlamento para evitar una votación para removerlo del cargo. Castillo está en prisión preventiva por 18 meses por el presunto delito de rebelión en una cárcel para mandatarios en Lima.
Las protestas, sobre todo del sector rural del sur de los Andes, brotaron a los pocos días de su asunción y se han expandido por el sur y Lima. Al momento han muerto 66 personas de las cuales 48 son civiles que recibieron disparos de de arma de fuego, según sus necropsias.
El Congreso no ha decidido al momento adelantar las elecciones presidenciales y parlamentarias. Cuatro planes para acortar el mandato de Boluarte y de los legisladores fueron archivados por no alcanzar los votos necesarios. Según la más reciente encuesta de febrero del Instituto de Estudios Peruanos, el 88% de los consultados pide un adelanto de las elecciones, el 90% desaprueba al Parlamento y el 77% a la mandataria Boluarte.