Un abogado de la procuraduría del estado de Nueva York dijo que la oficina se acerca al final de su investigación de tres años del expresidente Donald Trump y sus prácticas de negocios. Andrew Amer lo declaró en una audiencia sobre una demanda federal presentada por Trump contra la procuradora Letitia James, en su intento de frenar la investigación. Sus abogados argumentaron que la pesquisa obedece a motivos políticos.
Trump quiere una orden restrictiva preliminar para detener la investigación, que James ha dicho descubrió pruebas de que la compañía del expresidente, la Organización Trump, hizo valuaciones falsas sobre bienes como rascacielos y campos de golf en declaraciones financieras durante más de una década. James le pidió a una jueza que desestime la demanda de Trump.
La jueza federal Brenda Sannes dijo que estudiará ambos asuntos y emitirá una decisión por escrito. La jueza escuchó argumentos durante una hora vía video. Al final, no dijo cuándo emitirá su fallo. La abogada de Trump, Alina Habba, argumentó que la demócrata James hizo campaña en el 2018 con Trump como antagonista, y como procuradora ha usado el puesto para hostigar al expresidente y su compañía con una ola de citaciones y pedidos de evidencia.
«Nosotros hemos entregado millones y millones de páginas» de pruebas, le dijo Habbas a Sannes. «Seguimos recibiendo citaciones. Ellos siguen buscando cosas. Si no las encuentran, buscan de nuevo». Amer, asesor especial de litigios para James, respondió que el juez estatal que supervisa las disputas legales sobre citaciones emitidas por la procuraduría ha concluido que existe «evidencia suficiente para continuar la investigación».
Esa conclusión, junto con la evidencia descubierta hasta la fecha, «realmente cierra las puertas a cualquier argumento» de los abogados de Trump de que la oficina estaba procediendo de mala fe, dijo Amer. Habba cuestionó además la forma en que se han desarrollado la investigación y las batallas en la corte estatal sobre los pedidos de documentos de negocios de Trump y citaciones para declarar.
Afirmó que la oficina de James «le ata a uno las manos tras la espalda y dice te vanos a atacar y cuando decidimos atacar te puedes defender, pero no puedes atacarnos. No puedo presentar una moción para desestimar».
Estamos sentados con las manos atadas. Simplemente, estamos esquivando citaciones en estos momentos», añadió. Debido a su naturaleza civil, la investigación de James podría generar una demanda y solicitar sanciones financieras contra Trump o su compañía o incluso una prohibición de que estos participen en ciertos tipos de negocios.
