Un danés detenido en Noruega como sospechoso de un ataque con arco y flechas en una pequeña localidad en el que murieron cinco personas y otras dos resultaron heridas es un converso al islam que estaba fichado como radicalizado, según dijo hoy la policía.
«Hubo preocupaciones previas sobre que el hombre estaba radicalizado», dijo el jefe de policía Ole B. Saeverud en una conferencia de prensa. Había «valoraciones complicadas con relación al motivo, y pasará tiempo antes de que esto se aclare». No entró en detalles sobre a qué se refería con radicalizado.
El último reporte que expresaba preocupaciones sobre el sospechoso era del año pasado, añadió.
Las víctimas eran cuatro mujeres y un hombre entre los 50 y los 70 años, dijo Saeverud.
Las autoridades creían que el hombre no empezó a matar gente hasta que la policía llegó al lugar.
«Por lo que sabemos ahora, está razonablemente claro que algunos, probablemente todos, fueron asesinados después de que la policía entrase en contacto con el responsable», dijo Saeverud.
Tras su detención, el hombre habló a la policía de forma clara y tranquila y les dijo «Yo hice esto», según Ann Iren Svane Mathiassen, la investigadora de la policía que dirigía las pesquisas.
«Habló con tranquilidad y describió claramente lo que había hecho. Admitió haber matado a las cinco personas», dijo a The Associated Press.
El ataque ocurrió a la vista de docenas de testigos en la pequeña localidad, que el jueves amaneció conmocionada, según testigos. La policía ya había entrevistado a entre 20 y 30 testigos que vieron al hombre herir y matar a sus víctimas, según Svane Mathiassen.
«Estas son personas que le vieron en la ciudad. Antes de las muertes. Es cuando hirió a la gente», dijo Svane Mathiassen.
El testigo Erik Benum, que vive en la misma calle que un supermercado que era una de las escenas del crimen, dijo a AP que vio a trabajadores que habían escapado de la tienda cubriéndose con las puertas.
«Les vi escondidos en la esquina. Entonces fui a ver qué ocurría y vi a la policía entrar con un escudo y rifles. Era una imagen muy extraña», dijo.
El pueblo estaba inusualmente tranquilo a la mañana siguiente, añadió. «La gente está triste y conmocionada».
El arco y las flechas eran una parte del arsenal del agresor, aunque la policía aún no había confirmado qué otras armas utilizó. Las autoridades estaban reuniendo expertos en armas y otros técnicos para asistir en las pesquisas.
Las dos personas hospitalizadas estaban en cuidados intensivos. Uno de ellos era un policía fuera de servicio que estaba dentro de la tienda. En un primer momento se desconocía su estado.
El hombre estaba retenido bajo cargos preliminares, un paso previo a los cargos definitivos. La policía creía que había actuado solo.
La policía fue alertada del ataque en torno a las 18:15 del miércoles y detuvo al sospechoso unos 30 minutos después.
«No hace falta decir que esta es una situación muy grave y extensiva, y naturalmente afecta a Kongsberg y a los que viven aquí», dijo.
El primer ministro designado, Jonas Gahr Stoere, que se esperaba tomase posesión del cargo el jueves, calificó el ataque como un «acto cruel y brutal» en declaraciones a la agencia de noticias noruega NTB.
«Esto es irreal. Pero la realidad que cinco personas han sido asesinadas, muchas están heridas y muchas están conmocionadas», dijo Gahr Stoere el jueves a la televisora noruega NRK.
En un mensaje al alcalde de Kongsberg, el rey de Noruega, Harald V, dijo que los vecinos habían visto cómo «su entorno seguro se convirtió de pronto en un lugar peligroso. A todos nos estremece cuando ocurren cosas peligrosas cerca de nosotros, cuando menos se espera, en medio de la vida cotidiana en plena calle».
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, escribió en Twitter que estaba «conmocionado y entristecido por las trágicas noticias llegadas de Noruega».
Las autoridades municipales dijeron que la iglesia principal del pueblo estaba abierta para cualquiera que necesitara apoyo.
Kongsberg, una pequeña localidad de unas 26 mil personas está unos 66 kilómetros (41 millas) al suroeste de Oslo.