Un volcán en erupción en una isla española frente al noroeste de África abrió ayer dos nuevas fisuras en su cono de donde fluyó lava y las autoridades informaron que la actividad en la zona era «intensa».
Las nuevas fisuras, separadas por unos 15 metros (50 pies), lanzaron ríos rojos de piedra derretida hacia el mar, paralelamente a un flujo anterior que llegó al océano Atlántico días atrás.
El volcán era «mucho más agresivo», casi dos semanas después de entrar en erupción en la isla de La Palma, dijo Miguel Ángel Morcuende, director técnico del departamento de respuesta a emergencias volcánicas en las islas Canarias.
Durante la noche se registraron ocho terremotos de magnitud 3,5.
La erupción lanza gases y cenizas hasta 6.000 metros (casi 20.000 pies) de altura, dijeron las autoridades.
No se ha informado de víctimas, gracias a la evacuación inmediata de más de 6.000 personas desde que comenzó la erupción el 19 de septiembre.
Una zona de lava solidificada donde la roca derretida cae en el mar cubría más de 20 hectáreas (50 acres).
Las autoridades vigilaban la calidad del aire. Aumentaron los niveles de dióxido de carbono en la zona, pero no lo suficiente como para amenazar la salud, dijo el gobierno local. Sin embargo, recomendó a la gente que permanezca bajo techo y que además de las mascarillas utilice protección para los ojos debido a la intensa caída de ceniza volcánica.
El volcán ha emitido hasta ahora unos 80 millones de metros cúbicos de roca derretida, calculan los científicos, más del doble que en la erupción de 1971.
La lava ha destruido total o parcialmente más de 1.000 inmuebles, entre ellos hogares e infraestructura agrícola, además de haber cubierto 709 hectáreas (1.750 acres).
La Palma, con 85.000 habitantes que viven principalmente del cultivo de frutas y el turismo, es parte del archipiélago volcánico de las Canarias, situado frente al noroeste de África.
La isla tiene unos 35 kilómetros de largo y 20 km en su punto más ancho. La vida ha continuado normalmente en la mayor parte de la isla durante la erupción.