En esta fotografía de archivo, Alejandro Toledo participa en un acto de campaña en Lima, Perú. Foto La Hora/AP/Martín Mejía.

Un juez federal estadounidense resolvió que el expresidente de Perú, Alejandro Toledo, puede ser extraditado a su país natal, donde es buscado por delitos vinculados con un escándalo de corrupción ligado a la constructora brasileña Odebrecht.

El juez Thomas Hixson, de la corte del distrito norte de California, firmó la orden después de que Toledo batallara su extradición en un largo proceso. Perú pedía la extradición desde 2018.

Toledo fue detenido en 2019 en Estados Unidos por una solicitud de extradición ligada a sobornos que la constructora brasileña Odebrecht realizó en su país. Tiempo después se le cambió por un arresto domiciliario.

Los fiscales peruanos afirman que Toledo habría recibido hasta 35 millones de Odebrecht para favorecerlo en diversas obras de infraestructura durante su gestión entre 2001 y 2006.

Hixson dijo en su orden de 30 páginas que la corte «ha oído y considerado las pruebas de criminalidad y cree que son suficientes para sostener los cargos de confabulación y lavado de dinero bajo las provisiones del tratado de extradición entre Estados Unidos y la República del Perú».

El exfiscal federal Adam Fels, quien representó al Departamento de Justicia en el caso de extradición del expresidente panameño Ricardo Martinelli, explicó que la orden de extradición de un juez que ha escuchado el caso en una audiencia no puede ser apelada. Sin embargo, dijo, la persona a la que se busca extraditar —en este caso Toledo— puede presentar un recurso de habeas corpus en busca de frenar la extradición una corte federal de distrito sería la que decida si da lugar o no a ese pedido.

«Si la corte de distrito falla luego en favor del gobierno, la persona podrá entonces apelar la negación del habeas corpus ante una Corte Federal de Apelaciones», dijo Fels.

El habeas corpus es una petición para que la persona bajo arresto pueda ser llevada ante un juez o una corte.

La extradición del expresidente Toledo debe ser aprobada en última instancia por el Departamento de Estado estadounidense.

Los abogados de Toledo no respondieron de manera inmediata mensajes de The Associated Press en busca de comentarios.

En su decisión, Hixson dijo que en el caso hubo contradicciones e inconsistencias entre los dos principales testigos de la fiscalía. «Sin embargo, eso no elimina las pruebas suficientes que hacen creer que Toledo cometió confabulación y lavado de dinero», declaró el juez.

El caso duró bastante porque la defensa de Toledo pidió postergaciones a las audiencias repetidamente al decir que los documentos debían ser traducidos al español.

Estados Unidos extraditó a expresidente de Panamá Ricardo Martinelli en 2018.

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