El estado de Florida interpuso una demanda hoy contra el gobierno del presidente Joe Biden alegando que su política de inmigración es ilegal, y el gobernador Ron DeSantis firmó una orden que prohíbe a las agencias estatales ayudar con la reubicación de los inmigrantes no autorizados que llegan a la entidad.
La orden de DeSantis autoriza al Departamento de Policía de Florida y a la Patrulla de Caminos estatal «detener cualquier avión, autobús o vehículo dentro del estado de Florida que se crea que está transportando extranjeros ilegales a Florida desde la frontera suroeste».
También ordenó a las agencias recopilar información sobre la identidad de cualquier inmigrante que llegue a Florida de manera ilegal desde la frontera con México e instruyó a las dependencias estatales que no gasten dinero en ayudar a esos inmigrantes a menos que lo exija la ley.
La demanda entablada por la fiscal general Ashley Moody afirma que la política de inmigración federal costará al estado millones de dólares y causará afectaciones a Florida.
«Si bien algunos de los migrantes que llegan tienen solicitudes de asilo legítimas, muchos no. Algunos son miembros de pandillas y narcotraficantes que aprovechan la crisis en la frontera, como lo demuestra la impresionante cantidad de fentanilo incautado en la frontera este año», señala la demanda.
Moody y DeSantis realizaron una conferencia de prensa en el suroeste de Florida, durante la cual ambos criticaron a Biden en el tema de inmigración y elogiaron las políticas del expresidente Donald Trump.
«El presidente Biden está ayudando a los cárteles criminales», afirmó Moody.
Cuando le preguntaron sobre la demanda y la orden de DeSantis, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, respondió que no había visto la querella.
«Cualquier republicano o cualquier miembro que quiera tener una conversación constructiva sobre soluciones para abordar lo que todos estamos de acuerdo que no es un enfoque operativo o moral sostenible a largo plazo de la inmigración, estamos encantados de tener esa conversación», señaló Psaki.
DeSantis, quien es considerado un posible candidato a la presidencia para 2024, ha estado arremetiendo contra Biden en el tema de la inmigración durante meses. Envió policías de Florida a Texas para ayudar a frenar los cruces ilegales en la frontera, y posteriormente, él y Moody visitaron la frontera y realizaron una conferencia de prensa para hablar sobre el tema.