SEÚL, Corea del Sur / AP
El líder norcoreano Kim Jong Un reprendió a altos funcionarios por sus fallas en la prevención del coronavirus que provocaron una “gran crisis”, utilizando lenguaje subido de tono que elevó la posibilidad de un brote a gran escala en un país con pocos recursos para manejarlo.
El reporte del miércoles de la prensa del estado no especificó que error “crucial” provocó que Kim convocara a una reunión del Politburó del gobernante Partido del Trabajo, pero expertos afirman que el país podría estar lidiando con un marcado retroceso en su combate contra la pandemia.
Hasta el momento, Corea del Norte ha dicho que no tiene infecciones de coronavirus, a pesar de realizar pruebas diagnósticas a miles de personas y compartir una frontera poco vigilada con China. La mayoría de los expertos cuestionan dicha afirmación y les inquieta la posibilidad de un brote, considerando la pobre infraestructura de salud del país.
Durante la reunión del Politburó, Kim criticó a altos funcionarios por su supuesta incompetencia, irresponsabilidad y pasividad en la planeación y ejecución de medidas para combatir al virus en medio de una prolongada pandemia, reportó la agencia noticiosa oficial Korean Central News Agency.
“Altos funcionarios a cargo de importantes asuntos del Estado descuidaron la implementación de importantes decisiones del partido en cuestiones organizacionales, institucionales, materiales, científicas y tecnológicas como lo dicta la prolongada campaña de prevención epidémica de emergencia del Estado”, declaró Kim, según KCNA. Esto “causó una grave crisis en lo que respecta a garantizar la seguridad del Estado y la seguridad del pueblo, y conlleva graves consecuencias”.
El reporte también indicó que el partido revocó a un miembro no especificado del influyente presidio del Politburó, compuesto por Kim y otros cuatro funcionarios.
La referencia indica que Kim podría reemplazar a su jefe de gabinete, Kim Tok Hun, a quien se le atribuiría la responsabilidad por las fallas del gobierno en el combate a la pandemia, dijo Hong Min, un analista del Instituto de Unificación Nacional, con sede en Seúl.
“Es imposible que Corea del Norte admita alguna vez que tiene una infección — incluso si hubiera contagios a gran escala, el Norte definitivamente no revelaría esos hechos y seguiría promoviendo su campaña antiviral como la mejor”, declaró Hong.
“Pero también está claro que ha sucedido algo importante y lo suficientemente grande para ameritar una reprimenda a altos funcionarios. Esto podría significar un contagio masivo o algún tipo de situación en la que muchas personas estuvieron en riesgo directo de contagio”.