La Asamblea General de las Naciones Unidas eligió hoy a António Guterres a un segundo quinquenio como secretario general de la organización mundial de 193 miembros, en momentos que un mundo profundamente dividido enfrenta numerosos conflictos, el impacto creciente del cambio climático y la pandemia que aún envuelve el globo.
Los embajadores en la cámara estallaron en aplausos cuando el presidente de la asamblea, Volkan Bozkir, anunció la reelección de Guterres por «aclamación», sin votación.
Momentos antes, el embajador de Estonia, Sven Jurgenson, presidente del Consejo de Seguridad, leyó una resolución del organismo de 15 miembros que recomendaba la reelección de Guterres. Bajo la Carta de las Naciones Unidas, la Asamblea General elige al secretario general por recomendación del consejo.
Guterres fue el único candidato postulado por un Estado miembro de la ONU, su Portugal natal, del cual fue primer ministro y cuyo presidente presenció el evento en el recinto.
Inmediatamente después, Guterres prestó juramento y pronunció un discurso en el que exhortó a los países miembros a hacer «todo lo que podamos para superar las actuales divisiones geoestratégicas y relaciones de poder disfuncionales».
«Hay demasiadas asimetrías y paradojas», dijo. «Hay que abordarlas frontalmente».
Añadió: «lo que estamos viviendo hoy en cuanto a desconfianza es, espero, una aberración, pero no puede convertirse en la norma».
Tradicionalmente, los candidatos al puesto son postulados por un Estado miembro, pero ése no es un requisito, según la Carta.
Una resolución de 2015 volvió la selección del secretario general un proceso más transparente al permitir que los Estados miembros conozcan información básica sobre todos los candidatos y sus currículums e interrogarlos en sesiones abiertas.
Guterres, un exjefe de la agencia de la ONU para los refugiados, fue elegido como sucesor de Ban Ki-moon tras una campaña disputada arduamente y transparente, en la que intervinieron inicialmente 13 candidatos: siete mujeres y seis hombres. Asumió el 1 de enero de 2017.
Este año se postularon siete individuos sin apoyo de gobierno alguno, entre ellos la expresidenta ecuatoriana Rosalía Arteaga.