WASHINGTON (AP) — El presidente Joe Biden ordenó el jueves al gobierno federal que eleve las medidas anticorrupción como un tema central de la política exterior y seguridad nacional de Estados Unidos.
Un informe, elaborado en base a un examen de todas las agencias del gobierno y a ser entregado en seis meses, recomendará formas de fortalecer la lucha contra la corrupción.
El memorando presidencial solicita a las agencias a identificar cómo pueden mejorar la recopilación de inteligencia y combatir las actividades financieras ilícitas. Además, reafirma el compromiso de Washington de sancionar o emprender acciones legales contra los involucrados en la corrupción, instruye a las agencias para que trabajen con organizaciones internacionales para abordar el problema y enfatiza las medidas de cumplimiento en los programas de asistencia exterior.
En un comunicado, Biden dijo que luchar contra la corrupción es una “misión para el mundo entero”.
Dijo que “no se trata solo de un buen gobierno. Es defensa propia. Es patriotismo y es esencial para la preservación de nuestra democracia y nuestro futuro”.
El memorando tiene como objetivo cumplir una promesa de campaña. En un ensayo sobre política exterior escrito durante la campaña de 2020, Biden se comprometió a “liderar los esfuerzos a nivel internacional para llevar transparencia al sistema financiero global, perseguir los paraísos fiscales ilícitos, incautar activos robados y hacer más difícil para los líderes que roban a su gente esconderse detrás de empresas fachada”.
El miércoles, el Departamento del Tesoro anunció sanciones contra varios funcionarios y empresarios búlgaros y sus entidades relacionadas, en lo que se dijo que era la mayor acción del departamento contra la corrupción hasta la fecha.
Durante la visita del secretario de Estado Antony Blinken a Centroamérica esta semana, la corrupción en la región fue uno de los principales focos de sus conversaciones privadas con líderes extranjeros. Durante su viaje a la región la próxima semana, se espera que la vicepresidenta Kamala Harris plantee el tema cuando se reúna con los presidentes de Guatemala y México.