Más de 120 personas fueron arrestadas el miércoles en dos universidades de los estados de California y Texas, dijeron funcionarios, después de que esta semana estallaran protestas propalestinos en campus de centros educativos estadounidenses.
Los involucrados son del campus de la Universidad del Sur de California (USC) en Los Ángeles (oeste), donde 93 personas fueron arrestadas por invasión de propiedad privada, y de la Universidad de Texas (UT) en Austin (sur), donde 34 fueron detenidas, según las autoridades.
Los tensos incidentes son parte de los últimos enfrentamientos en campus universitarios entre las fuerzas del orden, incluidos policías con equipo antidisturbios, y estudiantes marchando con pancartas indignados por el creciente número de muertos civiles en la guerra de Israel contra el grupo islamista palestino Hamás.
La USC indicó en su cuenta de la red social X alrededor de la medianoche que la protesta había terminado y que el campus permanecería «cerrado hasta nuevo aviso».
«Los estudiantes, profesores, personal y personas con actividades en el campus pueden ingresar con una identificación adecuada», dijo la universidad.
Agentes de la policía de Los Ángeles fueron al campus el miércoles por la tarde y «ayudaron a la universidad a realizar arrestos por invasión de propiedad privada» cuando manifestantes se negaban a irse, declaró a periodistas la capitana Kelly Muniz.
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Las autoridades informaron que no hubo informes de heridos y que las patrullas permanecerían en el área el jueves.
Las crecientes protestas propalestinas comenzaron en la prestigiosa Universidad de Columbia, en Nueva York, donde se realizaron docenas de arrestos la semana pasada después de que las autoridades universitarias llamaron a la policía para poder sofocar un campamento de protesta que estudiantes judíos dijeron que era amenazante y antisemita.
Los manifestantes, entre ellos varios estudiantes judíos, han repudiado casos de antisemitismo y criticado a los funcionarios que lo equiparan con las críticas y oposición a las acciones militares de Israel en Gaza.
Mientras los estudiantes y otros manifestantes acampaban en los patios de las escuelas, ocupaban edificios universitarios e interrumpían las actividades del campus, esta semana las universidades reafirmaron sus derechos a la libertad de expresión y a la protesta pacífica.
Para muchos de los estudiantes judíos se creó un clima hostil contra ellos y las autoridades temen por la propagación de incidentes antisemitas.
El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, dijo a los periodistas en Columbia el miércoles que las manifestaciones «ponen un objetivo en las espaldas de los estudiantes judíos en Estados Unidos», y añadió que se podría recurrir al despliegue de efectivos de la Guardia Nacional si las protestas no paraban.
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