Las sanciones internacionales comienzan a surtir efecto en la industria armamentista rusa, que tiene dificultades para reemplazar los misiles guiados que utiliza su ejército en Ucrania debido al embargo de componentes electrónicos impuesto a Rusia, afirmó este lunes un funcionario del Pentágono.
Rusia ha lanzado tantos misiles contra Ucrania que se han quedado cortos «de armamento guiado de precisión y tienen problemas para reemplazarlo», declaró a la prensa este funcionario que pidió el anonimato.
«Creemos que las sanciones y restricciones a la exportación, especialmente de componentes electrónicos, han tenido un efecto en la base industrial de la defensa rusa», agregó. Por eso sobre las grandes ciudades como Mariúpol o Járkov lanzan bombas no guiadas que no distinguen entre un objetivo militar y un edificio de apartamentos, explicó.
Además, las fuerzas rusas siguen teniendo problemas de aprovisionamiento y disciplina, incluso entre los oficiales que «se niegan a obedecer las órdenes y a avanzar», dijo. Frente a la obstinada resistencia ucraniana, la operación rusa en el sur del país «apenas ha progresado en los últimos días», dijo el funcionario del ministerio de Defensa estadounidense.
I joined @SchmittNYC to discuss the federal government's ridiculous lack of transparency on the existence of UFOs. The Pentagon needs to publish a REAL report telling the American people what it knows instead of continuing its bogus cover-up. pic.twitter.com/YMoOluoE3t
— Rep. Tim Burchett (@RepTimBurchett) May 9, 2022
En Donbás, «los rusos no han podido lograr ningún progreso significativo», afirmó, algo que atribuyó a la incapacidad de las fuerzas rusas para coordinar los ataques aéreos y las maniobras en tierra, e incluso el clima que enloda el terreno, lo cual obliga a los tanques a permanecer en las carreteras pavimentadas.
Y «no han resuelto todos sus problemas de logística y mantenimiento», añadió.