Por primera vez Guatemala fue parte de la reunión de alto nivel del grupo asesor especial sobre Haití del Consejo Económico y Social este lunes 23 de septiembre, representado por Bernardo Arévalo, presidente de la República.
El mandatario guatemalteco reiteró su profunda preocupación por la grave crisis política, social y de seguridad que atraviesa Haití. La prolongada inestabilidad ha tenido efectos devastadores en la vida de millones de personas, a su consideración una solución integral y sostenible podrá poner fin a esta situación.
Para lograrlo, es fundamental que todos los actores involucrados respeten y promuevan los principios de solidaridad, cooperación internacional y un firme compromiso con la paz, el desarrollo y la democracia, refirió, Arévalo durante su intervención.
La construcción de la paz no puede limitarse únicamente a medidas de seguridad. Se requieren transformaciones profundas en los sistemas políticos, económicos y sociales de Haití, apoyadas por la comunidad internacional.
Arévalo dijo, el apoyo a Haití debe incluir no solo seguridad, sino también programas de desarrollo económico, acceso a la educación, fortalecimiento institucional y ayuda humanitaria.
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Gobernanza en América Latina y el Caribe
El presidente Bernardo Arévalo, participó en la segunda conferencia CAF/PNUD, donde manifestó, «la movilización social demostró en Guatemala el firme compromiso del pueblo con la democracia, mi país se encuentra en una encrucijada».
La firma de los acuerdos de paz en 1996 bajo los auspicios de las Naciones Unidas propiciaron importantes avances en la consolidación de la paz, la democracia y el estado de derecho. Indicando que las acciones de actores corruptos que buscaron evitar que asumiera el cargo, podrían revertir esos logros y propiciar una reversión autoritaria.
El camino a una gobernanza efectiva esta llena de retos y de posibilidades de transformación. Arévalo dijo, que las manifestaciones son un llamado a las autoridades, derivado a que los pueblos están perdiendo la paciencia y requieren de cambios inmediatos.
La desigualdad y las limitadas capacidades estatales y la desconfianza en las instituciones están debilitando el contrato social que sustentan la convivencia. Solo mediante el diálogo y la colaboración podrán impulsar el desarrollo sostenible que los pueblos necesitan.
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El gobierno de Arévalo, ha establecido espacios de diálogo con autoridades indígenas y ancestrales, organizaciones campesinas y sector privado, para atender prioridades que venían de gobiernos anteriores para fortalecer las relaciones entre el estado y la sociedad.
Buscan suscribir acuerdos internos en materia de salud, educación, medio ambiente y desarrollo sostenible. Esto permitirá atender el desarrollo y los retos de nuestra época, considerando que estos 4 de años de gobierno serán la base para cambios en un futuro.
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