Publicamos hoy un trabajo periodístico sobre la cantidad de accidentes viales en los que se ven involucrados conductores de motocicletas, lo que provoca anualmente un elevado número de muertes y también la saturación de las salas de emergencia de los diferentes hospitales.
Una epidemia silenciosa: los accidentes en moto y los colapsos de hospitales
Y es que el aumento en el uso de las motos como medio de transporte ha ido en constante aumento desde hace ya varios años sin que exista una adecuada regulación ni capacitación para prevenir ese mal uso que se expande de forma intensa e indiscriminada al punto de constituir una grave epidemia.
Esta semana se difundieron videos de la Policía Municipal de Tránsito mostrando que empezaron una campaña para sancionar a los conductores de motocicletas que circulan por las banquetas, que son de uso exclusivo para los peatones que se ven expuestos a graves riesgos por la creciente tendencia de las motos a usarlas como vía. Posiblemente la implementación de sanciones pueda ayudar a disminuir la anarquía actual que se manifiesta, además, por el irrespeto a los carriles en la vía pública.
La cantidad de accidentes mortales en los que se ven involucrados motociclistas es impresionante y crece cada año, razón que debiera forzar a la implementación de acciones que repercutan en una mayor seguridad vial para reducir la cantidad de incidentes con tan graves e irreparables consecuencias. El reglamento de tránsito, que prohíbe que los automóviles zigzagueen en los carriles tiene que ser respetado no sólo por quienes se desplazan en vehículos de cuatro o más ruedas, sino por todos los conductores, incluyendo por supuesto a los motoristas.
Cuando se implementó la obligatoriedad en el uso del cinturón de seguridad y la prohibición de usar los celulares mientras se conduce, la PMT capitalina implementó política agresiva para multar a los infractores, lo que tuvo extraordinario efecto para forzar al cumplimiento de la norma. El uso del cinturón es algo que hasta la fecha se respeta, aunque no ocurre lo mismo con los teléfonos, pero no cabe duda que la labor de los agentes de tránsito influyó para hacer respetar esas normas que han salvado muchas vidas.
Ahora es el turno de poner atención a las implicaciones y consecuencias de la cada vez mayor anarquía vial que generan los conductores de motos que no acatan ninguna de las normas esenciales de la seguridad vial y es necesario que se implementen acciones como la que ya empezó contra los que usan abusivamente las banquetas; aplicar multas es lo que puede hacer que vayan cambiando la actitud aquellos que se sienten dueños de la vía pública y que pueden conducir sus motos como les venga en gana.
Y es necesario incrementar los esfuerzos para mejorar el transporte público.