Walter Juárez Estrada
Los dirigentes de los partidos políticos que participan en la contienda electoral, para elegir en Junio a las autoridades del país, manipulan a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral, que se han convertido en marionetas de los fiscales de esas entidades al ser sometidos y prohibir que los medios de comunicación tengan acceso a las reuniones una clara y flagrante violación a la Constitiuciòn, pues todos los actos de la administración pública son públicos y a nadie de cualquier rango, se le puede vedar ese derecho, máxime su función es conocer de las fuentes madres, lo que tratan los funcionarios, especialmente en un período electoral.
Irma Elizabeth Palencia Orellana, presidenta del máximo Tribunal Electoral, dijo en el acto de toma de posesión y lo ha reiterado en espacios pagados en la televisión, que el proceso electoral es del pueblo y que el evento comicial será transparente. Pero en la práctica es una falacia y la autoridad electoral debe actuar con arreglo a las normas que regula la carta magna, la Ley Electoral y de Partidos Politicos y permitir a los periodistas estén presentes en las reuniones que tiene el organismo, con los fiscales. Esa veda da lugar a muchas sospechas y se piensa algo malo están cocinando. Dirigentes de cuatro partidos de los treinta reconocidos, han manifestado su preocupación al impedir el derecho a los reporteros que cubren la fuente de esa entidad.
La Junta Directiva de la Asociación de Periodistas de Guatemala, por recomendación del que escribe este espacio, en su calidad de la comisión jurídica de la entidad, presentó una nota al pleno del órgano electoral, solicitando audiencia para demandar que esa prohibición se revoque porque no tiene razón. Hasta el momento no ha habido respuesta y de mantenerse firme, la máxima entidad de prensa por medio de su presidente Byron Barrera, está dispuesta a denunciar el caso en órganos internacionales periodísticos o bien recurrir en amparo ante los tribunales constitucionales, para que se revoque esa ilegal decisión.
Es público cómo fue el proceso de elección de los magistrados electorales, que ahora se le han puesto de alfombra a los partidos políticos que les eligieron, como muestra un botón.
Es aconsejable que se revoque tan imprudente decisión. La actual magistratura ha sido duramente cuestionada por varios sectores que los sindican de poca capacidad y para rebasar la inconformidad de esos sectores, existen fallas de fondo en el sistema informático, que da lugar a que los votos sean manipulados y que se adjudiquen los cargos a los que no son idóneos y capaces, por lo que cuando antes sea problema de fondo da muchas dudas y que haya abstención de sufragantes al no confiar a los incapaces magistrados del Tribunal Supremo Electoral, que serán los verdaderos responsables si se descubren fraudes y ello puede originar severos conflictos que nadie quiere…