Walter Juárez Estrada
El manejo de las relaciones internacionales debe hacerse con meditación y analizar cualquier declaración que puede ser mal interpretada, máxime si las ideologías políticas son diferentes y originar polémica y romper una vieja convivencia. Causó malestar internacional el exabrupto de Ministerio Público, de intentar encausar en Guatemala, al excomisionado de las Naciones Unidas para investigar la corrupción en el país, de Iván Velásquez Gómez, ministro de la Defensa de Colombia, imputación sin mayores argumentos, que va al fracaso porque el exjefe de la exCICIG goza de fuero diplomático.
La ONU, salió en defensa de Velásquez e indicó que” el acuerdo entre las Naciones Unidas y el Gobierno de Guatemala, en relación con la extinta CCIG. gozan de privilegios de inmunidad y que su inmunidad continúa a pesar que ya no se encuentran en sus cargos los funcionarios que integraban dicha Comisión”, que en el Gobierno del comediante Morales, pidió ya no renovación de dicho convenio una especie de defensa de los corruptos de su gestión, entidad que fue solicitada por el expresidente Berger, que fue exitosa para encausar a los que habían saqueado el erario público y la caída en agosto de 2015 del corrupto Pérez Molina y Baldetti.
El presidente izquierdista colombiano Gustavo Petro, defendió a capa y espada a su ministro Velásquez, e hizo serios comentarios contra el presidente Alejandro Giammattei, cuando el mandatario estando en Madrid, España violando la autonomía del MP. sin analizar los alcances de sus declaraciones a nivel internacional, iban a tener rechazo en la ONU. y por supuesto, en Colombia. El exabrupto del MP. nació por las declaraciones salidas de contexto del jefe de la CEFI. Rafael Curruchiche, al imputar al excomisionado Velásquez, de varios ilícitos y pidió su captura, desconocimiento la materia diplomática que se utiliza de acuerdo con los tratados internacionales, donde nuestro país es signatario.
El fiscal de la FECI incriminó también en los hechos que se le sindican a Velásquez, a la exfiscal General Thelma Aldana y pidió su extradición de los Estados Unidos, así como también a la exsecretaria del MP. Mayra Veliz y a otros a quienes se les sindica de componendas y de obstaculizar la investigación en los contratos millonarios de la empresa brasileña Odebrecht, donde están procesados el expresidenciable Baldizón y el exministro Sinibaldi.
El ridículo de Guatemala fue mayúsculo por las violentas e impropias declaraciones de Giammattei, que oficiosamente respaldo la denuncia de Curruchiche y dijo que Velásquez, debe ser capturado y enfrentarse a la justicia. Declaraciones que podrán dar lugar rompimiento de relaciones entre Guatemala y Colombia, donde el perjudicado seria nuestro país por las transacciones comerciales que por años se han tenido. Se espera que las cosas cambien y que el caso de Velásquez, se olvide, no prosperen y quedara en ridículo el MP y por supuesto el presidente Giammattei.