La higiene de los perros no debe ser tan exhaustiva como la de una persona y bañarlo frecuentemente puede ser perjudicial para su salud. Entonces te preguntas, ¿Cada cuánto debo bañar a mi mascota?
Hacerlo diariamente no implica más felicidad para él, por el contrario puede desencadenar enfermedades perjudiciales para su salud.
El baño es una medida básica de higiene que mantiene el bienestar de tu mascota e incluso de tu familia. Mariana Castillo, médico veterinario recomienda que el baño del canino sea una vez al mes, a partir de los dos meses de vida del cachorro. Esto varía de acuerdo a la raza, pelaje y tamaño.
Las glándulas sebáceas del pelaje son agentes que ayudan a remover las células viejas de la piel, la mantienen lubricada y previene el resecamiento de los tejidos. Por eso, es esencial utilizar shampoos especiales para perros que no contengan agentes irritantes en su composición y que estén adaptados a su pH.
ENFERMEDADES POR MALA LIMPIEZA
Castillo menciona que uno de los errores más frecuentes en los dueños de caninos es utilizar shampoos medicados.
“Las personas los utilizan porque alguien se los recomendó, estos solo son buenos cuando son recetados, ya que pueden causar resequedad en el pelaje. Además tienen que estar diferenciados ya que existen shampoos específicamente para pelaje negro, blanco, e incluso acondicionadores para pelajes largos”, explicó.
Una mala práctica de limpieza predispone enfermedades que alteran el bienestar de la mascota. Castillo advierte que dejar húmedos los oídos puede causar infecciones, o si no se retira bien el shampoo puede provocar hongos, problemas alérgicos o infecciones bacterianas.
BAÑO SECO COMO ALTERNATIVA
Este es un tipo de lavado que puede aplicarse en perros mayores o enfermos y es útil para circunstancias que requieran rapidez. Los expertos lo recomiendan solo en ocasiones extremas ya que no brindan la misma calidad y eficacia de los shampoos tradicionales.
Según el peluquero canino español Miki Lluch, su uso es muy simple: se aplica la espuma en el pelo, esa espuma envuelve la suciedad mientras se deja secar, una vez seco, se cepilla eliminando la espuma juntamente con la suciedad.
¿CUÁNDO SABER QUE MI PERRO NECESITA UN BAÑO?
Cuando muestra señales de acaloramiento, suele intensificarse con los perros con abundante pelaje.
Cuando la actividad física es constante, un baño le generará placer.
Si está sucio de aceite, lodo, grasa.
Si ha estado en contacto con sustancias tóxicas, debes bañarlo de inmediato.
Los perros tienen un olor por naturaleza, sin embargo debes bañarlo si su pelaje tiene olor intenso.
Finalmente, debes cepillar su cabello constantemente para eliminar la suciedad y los enredos.
CUIDADOS DE LAS ZONAS SENSIBLES
Dentadura: Los perros pueden tener las encías sensibles y llegar a tener problemas de gingivitis o periodontitis. Por ello, debes estar atento a observar síntomas de inflamación de las encías, placa bacteriana, halitosis, pérdidas de piezas dentales o pus.
Para evitar este tipo de enfermedades, debes acostumbrar a tu cachorro a la práctica de limpieza bucal. Puedes envolver una gasa en tu dedo índice y hacer movimientos circulares siguiendo este orden: molares, premolares e incisivos.
Castillo menciona que existen geles antiplaca específicamente para perros, y que no hay ningún inconveniente que la ingieran. “La recomendación es hacerlo mínimo tres veces por semana”, detalla.
OREJAS: Mediante la limpieza frecuente de las orejas de tu canino puedes prevenir otitis y posibles infecciones.
Para limpiarlas puedes ayudarte de hisopos y gotas limpiadoras de oídos.
Levanta la oreja para limpiar la parte exterior de la cara interna de la oreja, suavemente pero sin miedo, ya que, al estar el algodón hidratado, tu perro no sentirá ninguna molestia.
A continuación, introduce el hisopo hacia la parte interna del oído y ligeramente inclinado hacia abajo. Puedes hacerlo tranquilamente porque los oídos de las mascotas no son como los de las personas, sino que terminan en forma de ‘L’, por lo que el hisopo nunca le va a hacer daño.
OJOS: Son órganos sensibles, propensos a padecer de infecciones, acude a un veterinario si notas variaciones como hinchazón, enrojecimiento, lagrimeo, mucosa, etc.
Diariamente, debes limpiarlos con una gasa esterilizada y un limpiador ocular. Para hacerlo, presiona suavemente la gasa contra el lagrimal del ojo de tu canino para que empape y ablande, cuando esté húmeda, quítala haciendo un movimiento desde el lagrimal hacia abajo y hacia afuera.
Recuerda que cuando termines un ojo y comiences con el otro, debes cambiar de gasa, para evitar que las infecciones se expandan al otro ojo.
Existen remedios caseros que puedes implementar para el cuidado de tu canino, como por ejemplo, esencias para eliminar las pulgas, sin embargo usar los productos adecuados te garantizan el bienestar de tu perro.
Finalmente, puedes llevar a tu perro al Grooming, para que personas calificadas se encarguen de la limpieza de tu mascota. Para ello tu canino deberá contar con dos vacunas múltiples para evitar cualquier enfermedad.
Comparte con nosotros fotos de tu mascota mientras disfruta de su baño.
