Sergio Penagos
Se llama parodia a un tipo de sátira o imitación burlesca de una obra artística, o de cualquier otra forma de discurso.
El presidente Alejandro Giammattei participó este jueves con políticos locales y extranjeros en el Desayuno de Oración, que se realizó en un hotel de la Ciudad de Guatemala, organizado por Guatemala Próspera y su presidente Carlos Sandoval. Asistieron: Shirley Rivera, presidenta del Congreso; Consuelo Porras, fiscal general del Ministerio Público; Dina Ochoa, presidenta de la Corte de Constitucionalidad, Mario Búcaro canciller y otros personajes de la farándula religiosa, política y empresarial. No podían faltar los visitadores gringos Tracey Mann, congresista de los Estados Unidos; Kevin Roberts, presidente de la Fundación Heritage y Mark Smith, presidente de la Universidad Internacional Columbia. En la época colonial el visitador de tierras era un individuo investido de autoridad, cuya labor consistía en inspeccionar y revisar la conducta de las autoridades de la colonia. También asistieron María Tuyuc, de la Red Global de Empresarios Indígenas; Hermann Girón, presidente del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF) y Stephanie Melville, de la junta directiva de la Cámara de Industria de Guatemala.
En el discurso oficial, el presidente Alejandro Giammattei dijo: fui electo por el pueblo de Guatemala para gobernar, pero no olvidemos que toda autoridad viene de Dios y esto es un privilegio y a la vez una tremenda responsabilidad, pues es a él a quien le tendremos que rendir cuentas. Confiamos que cuando actuamos considerando el bien común, la justicia y el bien de la gente, tenemos la conciencia tranquila y estamos en paz con Dios. Como es tradicional en él, utiliza palabras cuyo significado ignora. Para ser un buen líder las Sagradas Escrituras ofrecen una guía: el temor de Dios. Es a Él, a Dios, a quien le tendremos que rendir cuentas. Pero ocurre que: El temor de Jehová es aborrecer el mal; la soberbia y la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa. (Proverbios 8:13) ¿Sabía que se estaba describiendo este patético, paranoico y pervertido presidente? ¿Por qué deberíamos tener temor de Dios si Dios es amor? En la Biblia está escrito claramente: En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor. Persistiendo en su ignorancia, el presidente continuó: en el antiguo testamento de las escrituras se escribe la evaluación hecha al rey Josafat, en el que como a todos los líderes nos pasa, tenemos muchas cosas que mejorar y otras que Dios ve que hacemos bien. Agregó que el rey Josafat, cuyo nombre significa el Señor juzga, incidió en la reforma que abarcó cuestiones judiciales, religiosas y civiles. Puso interés en designar magistrados que hicieran las cosas con justicia e integridad. No vulgares marionetas a su servicio (eso lo digo yo). Luego expresó: en todas las épocas ha habido líderes a los que les ha tocado luchar por los valores más fundamentales de sus pueblos. A él y su gobierno les ha tocado enfrentar una pandemia y superar los retos y sus efectos en la salud, en la sociedad, en la economía. También enfrentamos a Eta, Iota, Amanda, Cristóbal, erupciones y hasta la plaga de langostas en Petén ¿Son valores fundamentales?
El evento fue aprovechado por la cúpula empresarial para entregar un reconocimiento, por obstrucción a la Justicia, a la fiscal general y jefa del Ministerio Público, quien no desaprovechó la oportunidad para meter su cuchara: Gracias a la oración operamos para que Dios cumpla su plan en nosotros, ya que conoce nuestros corazones y sabe lo que necesitamos, dijo al recibir el reconocimiento.
Esta payasada de orar en público contraviene lo expresado en la Biblia: Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público. (Mateo 6.6). ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera, a la verdad, se muestran hermosos, más por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia. Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad. Y cuando oréis, no seáis como los hipócritas; porque a ellos les gusta ponerse en pie y orar en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos por los hombres. Ay de vosotros, fariseos que amáis los primeros asientos en las sinagogas y los saludos respetuosos en las plazas. Cuando oréis no uséis vanas repeticiones como los políticos, ellos piensan que por su palabrería serán oídos. No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros las pidáis.