Luego de haber alcanzado en junio la inflación más alta en 11 años (7.55%) y la más alta del 2022, en julio se registró el segundo incremento más significativo del año en el precio de bienes y servicios, con una inflación interanual de 8.36% para el segundo récord en dos meses. Además, ese monto es el más elevado desde diciembre del 2008, en plena crisis financiera global, cuando fue de 9.4%.
#PORTADADEHOY
Inflación llega a 8.36%, la más alta en 13 años👉 [https://t.co/5UMhoLLKpp] pic.twitter.com/Ckf278SPa6— Diario La Hora (@lahoragt) August 8, 2022
Los problemas persistentes en las cadenas de suministro por la pandemia del COVID-19 y el encarecimiento de las materias primas como el petróleo y alimentos básicos, impulsado aún más por la guerra en Ucrania, se han reflejado en el ritmo inflacionario (8.36%), la inflación acumulada (6.81%) y la inflación mensual (1.08%) del mes pasado.
INFLACIÓN SUPERA PROYECIONES
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación a julio de 8.36% es la segunda más alta de las observadas en los meses de junio del periodo 2015-2021.
La inflación reportada por el INE superó en más de un punto porcentual las expectativas adelantadas por los analistas, quienes estimaban que para julio se ubicaría en 7.32%, según una encuesta publicada por el Banco de Guatemala (Banguat).
De acuerdo con Sergio Recinos, presidente del Banguat, el nivel de inflación un 78% es de origen externo y un 22% interno. El rubro externo alude a la crisis persistente por el COVID-19 y más recientemente el impacto de la invasión de Rusia en Ucrania.
ALIMENTOS Y TRANSPORTE: GASTOS CON MAYORES ALZAS
Por división de gasto, resalta el comportamiento de alimentos, con un 12.71%, transporte (8.68%), muebles (8.39%). Le siguen los gastos de restaurantes (8.16%), bebidas alcohólicas (5.96%) y vivienda (4.61%).
De forma segregada, los gastos que experimentaron el mayor aumento en su precio fueron el diésel con 34.59%, maíz (33.37%), entrada al estadio (31.77%), servicios de transporte aéreo (31.49%) y el chile pimiento (27.67%).
En particular, el diésel mostró un decrecimiento en comparación con junio cuando experimentó un aumento de (49.86%), de la misma forma para la gasolina superior, pues pasó de 42.00% en junio a 23.55% en julio.
De hecho, el servicio de bus extraurbano mostró la mayor reducción porcentual en sus precios a nivel interanual con un -7.13%.
CANASTA BÁSICA Y AMPLIADA AUMENTAN
De acuerdo con los datos del INE, una familia guatemalteca promedio de 4.7 integrantes necesitó en julio Q3,369.69 para adquirir sus alimentos básicos (CBA) y Q7,780.40 para solventar otros gastos como transporte, vestimenta, salud, entre otros (CA).
En ese sentido, las CBA y la CA aumentaron 12.2% (Q366.37) en comparación con las canastas de julio del 2021, cuando su precio fue de Q3,003.32 y Q.6,934.47 respectivamente.
REGIÓN II Y REGIÓN VII CON LAS MAYORES INFLACIONES
A nivel nacional, el ritmo inflacionario de la región II que comprende los departamentos de Alta Verapaz y Baja Verapaz fue de 12.18%, seguida de región VII (Huehuetenango y Quiché) con 11.47%. Ambas regiones registraron las mayores alzas en el nivel general de precios, superando la alcanzada a nivel república (8.36%).
Por división de gasto y región, resalta como la mayor alza la división de alimentos en la región II (Cobán) con 4.04%.
FMI: INFLACIÓN PUEDE PERSISTIR
De acuerdo con el artículo del Fondo Monetario Internacional (FMI) “Los vientos mundiales cambian de dirección y desafían a América Latina”, los bancos centrales de la región han endurecido debidamente la política monetaria para contener los efectos de la inflación. Aun así, el encarecimiento de los bienes y servicios podría resultar persistente debido a la combinación de shocks y a las presiones sobre precios cada vez más generalizadas.
En Guatemala, la Junta Monetaria aumentó la tasa de interés líder, al pasar de 1.75% a 2.25%. Esta medida se ha repetido en otros países de la región como en Costa Rica donde en enero la tasa de referencia era de 0.75% y en junio llegó a 5.50%.
INFLACIONES MÁS ALTAS DE LOS ÚLTIMOS 25 AÑOS
Según el FMI, con una mayor incertidumbre económica mundial, las condiciones financieras externas para América Latina y el Caribe están empeorando, lo cual genera un incremento de los costos de endeudamiento y de presiones cambiarias.
“Como en otras partes del mundo, es probable que las presiones de precios permanezcan elevadas por algún tiempo en la región, según indican nuestros pronósticos de inflación de 12.1% y 8.7% para 2022 y 2023, respectivamente, lo que representa las tasas más elevadas de los últimos 25 años”, apuntó el organismo.
