Para un guatemalteco que devenga el salario mínimo cada vez es más complicado comprar productos básicos para la alimentación. Foto: La Hora/Archivo
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Para un guatemalteco que devenga el salario mínimo no agrícola, agrícola y maquila comprar los productos básicos para su alimentación y la de su familia se convierte cada día más en un gasto complicado de solventar, pues el encarecimiento de los combustibles y alimentos a nivel internacional ya se refleja en la Canasta Básica Alimentaria (CBA) local.

 

En junio el costo total de adquisición de la CBA llegó a Q3,311.95, para superar por Q312.2 el monto del salario mínimo no agrícola (Q2,959.24), mientras que al salario mínimo agrícola (Q2,872.55) y de exportadora y maquila (Q2,704.35) lo rebasa por Q439.4 y Q 607.6 respectivamente.

La CBA también supera a los salarios mínimos con la bonificación incentiva de Q250.00 incluida.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en el último mes, cada familia guatemalteca promedio de 4.7 integrantes tuvo que cancelar un 10.4% (Q312.28) más de lo que pagaron en junio del año pasado para alimentarse de los 34 productos que componen la CBA y cubrir el requerimiento energético de 2,262 calorías para rendir en sus labores diarias.

Al dividir la CBA entre 30 días al mes, significa que cada hogar cuenta con Q110.39 diarios para comer, pero el salario diario no agrícola, el más alto de las tres categorías, es de Q97.29 según el Ministerio de Trabajo (Mintrab).

Incluso en junio del 2021, el precio de la CBA ya superaba por Q40.43 al salario mínimo no agrícola. En ese entonces, el costo de la canasta era de Q2,999.67.

CANASTA AMPLIADA

Además de comprar sus alimentos esenciales, las familias también necesitan resolver sus gastos de vestuario, vivienda, salud, educación, comunicaciones, transporte y recreación, entre otros.

Estos gastos diversos están contenidos en la Canasta Ampliada (CA) que a junio alcanzó Q7,647.07 y al igual que la CBA aumentó 10.4% (Q721.03) en comparación con hace un año.

Esta cantidad ha rebasado el ingreso promedio mensual más alto de la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos 1-2019 (ENEI), última con datos ampliados, ya que, según el estudio del INE, las ocupaciones de directores y gerentes tienen un ingreso promedio de Q7,318, es decir Q329.07 menos que el costo de la CA.

SALARIOS MÍNIMOS EN MEDIO DE ALTA INFLACIÓN

La percepción de un incremento generalizado en los precios de los bienes y servicios por parte de los guatemaltecos ha dejado de ser latente para convertirse en una realidad tangible reflejada en números, tanto en el índice de inflación como en las etiquetas de los mercados y supermercados, así como en los ajustes a los presupuestos de las familias.

De acuerdo con los datos del INE, en junio la inflación se disparó al llegar a 7.55%, la más alta de las observadas desde agosto del 2011 cuando fue de 7.63%. Entonces fue provocada por aumento en los precios internacionales del trigo y maíz y los problemas de suministros por la tormenta tropical 12-E en el país.

Además, muestra un comportamiento similar al registrado durante la crisis financiera del 2008-2009 de 9.4%, así como, un aumento más acelerado pasando de 2.98% en febrero de este año a 7.55% en cinco meses.

EVOLUCIÓN DEL SALARIO MÍNIMO Y LA INFLACIÓN

En la siguiente gráfica, tomando el promedio del salario mínimo de las tres actividades, se puede observar la evolución de éste en comparación con la inflación, así como su crecimiento interanual.

SALARIOS AUMENTARON UN 4.75% ESTE 2022

Después de que los salarios mínimos se mantuvieran sin modificaciones por dos años, el 17 de diciembre de 2021 se firmó el Acuerdo Gubernativo número 278-2021 para fijar los salarios mínimos vigentes este 2022.

Según el gobierno del presidente Alejandro Giammattei, para su fijación la Comisión Nacional del Salario (CNS) tomo en cuenta las siguientes condiciones:

– El poder adquisitivo.
– La inflación.
– Situación socioeconómica.
– Productividad de las empresas y sectores.
– La extensión y complejidad de trabajo.

El comunicado del Mintrab, destacó las proyecciones de cierre de inflación del INE en el 2021 de 3.25% y la proyección de crecimiento del PIB de 7.5% por el Banco de Guatemala (Banguat).

Según el Ejecutivo, “después de realizar un análisis exhaustivo” del trabajo de las Comisiones Paritarias de Salario Mínimo, de los informes de la CNS, del Banguat y del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), decidió incrementar el salario mínimo en un 4.75% para las tres actividades económicas.

Sin embargo, en la fecha de la firma del acuerdo ya se conocía que la CBA de noviembre había alcanzado Q3,082.30, cifra mayor a los tres salarios mínimos sin bonificación.

Actualmente, se sabe que la inflación cerró en 3.07% el año pasado y que el PBI alcanzó el 8%, pero el aumento de 4.75% en los salarios han sido consumidos rápidamente por la inflación de 7.55%.

EMPRESAS LIMITADAS PARA AUMENTAR SALARIOS

El aumento del 4.75% en los salarios mínimos “ya se lo comió” el aumento de la CBA, señaló Luis Linares, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), quien indicó a La Hora Economía que en tan solo seis meses el quintal de maíz ha aumentado de Q160 a Q280.

A pesar de que la crisis económica no parece culminar pronto, el también exministro de Trabajo, explicó que el ajuste salarial no puede realizarse en medio de esta coyuntura porque según la ley debe ser anualmente y, además, debe ser un incrementó entre el 5 y 6% ya que muchas empresas no tienen la capacidad de ajustar sus utilidades.

Agregó que tampoco es recomendable aumentar significativamente los salarios en medio de periodos inflacionarios debido a que podría aumentar aún más el precio de los productos.

SALARIOS MÍNIMOS DE 2023 DEBEN AUMENTAR

Erick Coyoy, economista del Instituto de Investigación y Proyección sobre Economía y Sociedad Plural (IDIES), de la Universidad Rafael Landívar, comentó a este medio que para mantener la consistencia “el Gobierno debería tomar en cuenta esta inflación para la modificación del salario mínimo para el 2023. Sobre todo, considerando que ha quedado bastante claro que las cifras reales del aumento de precios en Guatemala son mayores”, explicó.

Destacó que es fundamental que la población pueda mantener su capacidad de compra, ya que la inflación afecta más a las personas de más bajos ingresos porque no tienen ninguna capacidad de ahorro.

 

Según el economista, la baja productividad deriva de un nivel elevado en el costo de vida de los guatemaltecos debido a que, desde el punto de vista empresarial, esta baja no puede justificar mayores salarios.

Sobre lo anterior recae la relevancia de la canasta básica como un referente importante para incentivar el crecimiento económico, ya que “los inversionistas necesitan saber el nivel de inflación del país para tomar sus decisiones de inversión”, indicó el investigador.

TRABAJADORAS PREOCUPADAS POR LA SEGURIDAD ALIMENTARIA

Maritza Velásquez, coordinadora general de la Asociación de Mujeres Trabajadoras del Hogar, a Domicilio y de Maquila (Atrahdom), aseveró que a las trabajadoras les preocupa la poca atención por parte del gobierno de Giammattei al tema de los salarios mínimos en un contexto de alza en el precio de los productos.

“Son muchas las recomendaciones que a partir de la Comisión Nacional de Salarios se hacen por parte de los trabajadores, pero tampoco lo toman en cuenta y al final termina decidiendo el presidente el salario que le dicen sus malos asesores”, comentó.

La principal preocupación del gremio es que el índice del desempleo se ha incrementado provocando más delincuencia y migración irregular, pero especialmente inseguridad alimentaria.

“Hemos planteado en reiteradas oportunidades la necesidad de que el salario mínimo sea incrementado al nivel del costo de la canasta básica, porque el salario se constituye como una garantía de seguridad alimentaria para la clase trabajadora”, explicó.

REGIONES AGRÍCOLAS GOLPEADAS POR LA INFLACIÓN

El salario de campo se mantuvo igual por cuatro años, entre el 2018 y el 2021, y para este año aumentó Q4.28 diarios, situación que contrasta con los altos niveles de inflación en áreas rurales del país.

A nivel de regiones, el mes pasado la inflación de la región II que comprende los departamentos de Alta Verapaz y Baja Verapaz fue de 9.66%, seguida de Petén con 9.20%.

Ambas regiones registraron las mayores alzas en el nivel general de precios, incluso superando la alcanzada a nivel república (7.55%).

PNUD: LUCHAR CONTRA EL HAMBRE DEBE SER UNA PRIORIDAD

“Un importante desequilibrio entre sus logros económicos agregados, que contrasta con un desarrollo social que avanza lentamente” es uno de los rasgos que el Informe Nacional de Desarrollo Humano (INDH), elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) destaca en Guatemala.

En el documento divulgado recientemente, se lee que el impacto que algunos hogares enfrentaron en la alimentación durante la pandemia.

En la primera etapa de restricciones, la situación era “preocupante”, pues casi la mitad de las personas encuestadas decía que tenía dificultades para financiar su alimentación, lo cual “muestra la fragilidad de las condiciones de vida de un porcentaje alto de guatemaltecos”, señala.

Posteriormente, a medida que la gente retomó sus labores, el porcentaje se fue reduciendo, aun así, en junio de 2021 seguía cercano al 28 %.

Además, la lucha contra el hambre es la segunda inversión que para los guatemaltecos el gobierno debería darle prioridad después de mejorar el sistema de salud, según la encuesta elaborada por el PNUD.

BANCO MUNDIAL TEME RECESIÓN

Por la crisis económica mundial, las autoridades deben prepararse para tomar las acciones adecuadas que encaminan la economía por un rumbo más favorable, pues el Banco Mundial ya advirtió sobre el riesgo de que la economía global entre en un período de estanflación, es decir, de crecimiento económico bajo o nulo acompañado de una alta inflación a causa de la guerra en Ucrania y la persistencia de los efectos de la pandemia.

Ante dicho escenario, Coyoy recomienda que el gobierno reoriente recursos para la atención de necesidades de las personas con más bajos ingresos, en especial a las del sector informal que ganan menos del salario mínimo.

Por su parte, Linares recomienda que los instrumentos de política monetaria estén bien dirigidos a enfrentar la inflación, así como reforzar las políticas de asistencia social y prever un aumento salarial mínimo para el próximo año, pues la crisis significa un desafío para socavar la pobreza y la presión migratoria.

Mientras que Velásquez reiteró que el salario mínimo debe ser acorde al costo de la CBA y la CA, y que el gobierno debe garantizar la sostenibilidad alimentaria para toda la población en medio de las condiciones climáticas actuales.

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