El presidente Joe Biden pidió el martes a los estadounidenses confrontar al poderoso lobby pro-armas del país después de que un adolescente matara a tiros a 18 niños en una escuela primaria en Texas.
«¿Cuándo, por el amor de Dios, nos vamos a enfrentar al lobby de las armas?», dijo Biden, visiblemente emocionado, al dirigirse a la nación desde la Casa Blanca. «Tenemos que dejarles claro a todos los legisladores de este país: es hora de actuar».
«Esperaba que cuando me convirtiera en presidente no tuviese que hacer esto», lamentó el demócrata de 79 años, informado de la tragedia en el avión de regreso de una gira diplomática por Asia.
«Estoy descorazonado y cansado», declaró.
As a nation we must ask: When in God’s name will we stand up to the gun lobby?
When in God’s name will we do what needs to be done?
I’m sick and tired of it. We have to act.
— President Biden (@POTUS) May 25, 2022
«No me digan que no podemos tener un impacto sobre esta carnicería», lanzó Biden a propósito del flagelo de muertes por armas de fuego en Estados Unidos, pidiendo «transformar el dolor en acción» para regular más las armas, particularmente las de asalto.
«Los fabricantes de armas han pasado dos décadas promoviendo con agresividad las armas de asalto que les proporcionan los mayores beneficios», denunció.
Asimismo arremetió contra la oposición republicana, que bloquea todos sus intentos de aprobar en el Congreso medidas como la verificación obligatoria de antecedentes penales y psiquiátricos para los compradores de armas.
Los conservadores se niegan hasta ahora a restablecer la prohibición de comercializar rifles de asalto a civiles, como la que existió en Estados Unidos entre 1994 y 2004 para algunas armas semiautomáticas.
«Aquellos que bloquean o retrasan legislaciones de sentido común sobre armas de fuego, (…) no los olvidaremos», dijo Biden, que solo puede emitir decretos para controlar al margen la circulación de armas de fuego.
Tonight, there are parents who will never see their child again. Parents who will never be the same.
To lose a child is to have a piece of your soul ripped away forever.
I ask the nation to pray for them — to give them strength in the darkness.
— President Biden (@POTUS) May 25, 2022
«Perder a un hijo es como si te arrancaran una parte del alma», dijo el presidente, un ferviente católico que ha perdido dos hijos, una hija pequeña en un accidente y un hijo adulto que murió de cáncer.
Junto a su esposa, Jill Biden, pidió a Estados Unidos que «rece» por las familias afectadas.
«Van a necesitar mucha ayuda, muchas oraciones».