El presidente Alejandro Giammattei encabeza el oficialismo y a pedido suyo varias ampliaciones se han concretado. Foto La Hora / Presidencia

El oficialismo y sus aliados aprobaron en noviembre pasado Q106 mil 229 millones para el Presupuesto del Estado 2022, pero la maquinaria ha seguido activa en pleno año preelectoral y a pedido del presidente de la República, Alejandro Giammattei continúa con ampliaciones al extremo que a la fecha, el monto ya supera los Q112 mil millones, de acuerdo con la página del Sistema de Contabilidad del Estado (Sicoin).

Entre las ampliaciones figuran los Q3.3 mil millones para el Ministerio de Comunicaciones Infraestructura y Vivienda (CIV), así como para el Ministerio de Energía y Mina (MEM), un total de Q2.5 mil millones para el subsidios a las gasolinas regular y superior, así como al diésel, que comprende las dos fases, incluida la reciente ampliación para otros dos meses a partir del 31 de mayo.

Es decir, el Organismo Ejecutivo tiene un Presupuesto tan alto que pone en riesgo los mecanismos de transparencia y las medidas para fiscalizar, siendo un año preelectoral.

Además, el oficialismo gestiona acciones como intentar aprobar reformas a la Ley de Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado, para permitir que recursos de los Consejos Departamentales de Desarrollo (Codede) que no sean utilizados en el actual ejercicio fiscal sean ejecutados en el año electoral visualiza la utilización del Presupuesto con otras intenciones.

Por ello, La Hora consultó a distintos analistas que emitieron su opinión acerca del elevado Presupuesto y el riesgo que presupone.

 

CUX: LOS RECURSOS LOS VAN A UTILIZAR PARA LA CAMPAÑA POLÍTICA

Eddie Cux, de Acción Ciudadana expresó que el denominador común de las ampliaciones presupuestarias es la ausencia de control que se tiene sobre el gasto público, no solo a nivel normativo, ya que los decretos que han emitido deben tener mecanismos de transparencia y fiscalización.

“Los políticos quieren eliminar los pocos controles que tiene la Ley de Presupuesto para gastar de forma discrecional estos recursos”, denunció.

“Es preocupante como este Gobierno ha priorizado ampliar el presupuesto sin ningún tipo de criterio técnico, sin ningún tipo de priorización de necesidades de la población, ningún dictamen económico que refleje la realidad del país y que lo hagan sin controles”, enfatizó Cux.

 

Además, indicó que el Gobierno ha encontrado una fórmula para ampliar el presupuesto y dejarlo más grande del que se aprobó en un principio, como sucedió a través de la pandemia, lo cual deja un techo presupuestario holgado que no permite tener un control del gasto.

Con lo anterior, Cux explicó que podría interpretarse que lleven doble contabilidad en el Estado, porque por una parte hay una Ley de Presupuesto que ya fue aprobada y hay un monto específico, pero ellos ejecutan sobre la base de las ampliaciones presupuestarias.

“Se interpreta que estos recursos los van a utilizar para la campaña política del otro año (…) estas ampliaciones son para gastos discrecionales fuera de control que fácil puede llegar a bolsas de corrupción”, resaltó.

Eddie Cux, representante legal de Acción Ciudadana enfocó sus respuestas sobre la transparencia. Foto La Hora

QUEZADA: EL PRESUPUESTO ES PROBABLEMENTE PARA NECESIDADES ELECTORALES

Francisco Quezada, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), expresó que la aprobación presupuestaria no solo del presupuesto interanual sino el presente ejercicio denota que es un tema no planificado ni estructurado, y es una reacción probablemente de lo que está en la vista: las elecciones generales del próximo año.

“Es probablemente para satisfacer necesidades electorales, obras para satisfacer puntuales demandas de diputados y alcaldes que buscan consolidarse, pues hay una elección a la vista, las obras de infraestructura no se planifican a corto plazo sino son producto de una detenida planificación, se ve ese acomodo de satisfacer necesidades inmediatas, no necesidades de fondo, y prueba de ello es que ni siquiera tiene un proceso de conclusión, no tienen racionalización ni priorización”, explicó Quezada.

Agregó que el tema de los subsidios viene a complementar “con una primera aprobación de subsidios a los combustibles que no se notó, y una segunda que tampoco se va a notar”, además que la escalada de precios que se registra en algún punto se desconoce si se podrá seguir subsidiando.

 

“Lo que está sucediendo son señales para satisfacer a corto plazo a la población, evitar que los guatemaltecos reaccionen negativamente en contra de las autoridades oficiales, se está comprando tiempo por un lado con el tema de los subsidios y el de las obras de corto plazo, que al final todos en algún punto vamos a tener que pagarlo”, agregó.

Además detalló que al no construir obras de fondo que son profundas y necesarias, así como con los subsidios son temas que únicamente responden a que está en marcha la campaña electoral.

“La utilización de los recursos es para el poder centralizado y el poder local donde están la presión para gastar en determinadas obras, para satisfacer las necesidades puntuales de alcaldes y diputados”, aseveró.

También señaló que estas acciones solo generan un gasto irracional porque no atiende necesidades estratégicas y planificadas, sino está “tocando la puerta” de los aliados, y se construyen este año porque políticamente es el momento que impactan más.

Francisco Quezada del CIEN explicó que estás ampliaciones no se enfocan en satisfacer necesidades puntuales de las comunidades. Foto La Hora/Vía CIEN/Twitter

ORTIZ: MÁS RECURSOS NO SE TRADUCEN EN MÁS BENEFICIOS A LA POBLACIÓN

Asimismo, Édgar Ortiz, de la Fundación Libertad y Desarrollo destacó que el presupuesto actual es el más grande que ha tenido un gobierno en la historia de Guatemala, y en especial cuando se dieron fondos por la pandemia; sin embargo, los resultados no son los óptimos porque demuestra que el aparato estatal tiene serias deficiencias para prestar servicios que es un problema de la institucionalidad como tal.

“Más recursos no se traducen en más beneficios a la población, es imprudente aumentar el presupuesto tomando en cuenta que el clima actual para endeudarse no es bueno. Estamos a las puertas de una posible crisis económica mundial entonces no es prudente comprometer los recursos”, explicó.

Asimismo, resaltó que el gobierno está destinando mucho dinero al subsidio, por lo cual “la pregunta es por qué está comprometiendo recursos que van hacer falta después sabiendo que el subsidio es insostenible, o van a tener que endeudarse para cubrirlo, lo cual es absurdo, en vez de estar comprometiendo dinero no ejecutado deberían guardarlo”, agregó.

 

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