Aunque el gobierno de Guatemala ya solicitó al Banco Mundial (BM) “esperar unos días” que le permitirían al presidente Alejandro Giammattei un nuevo plazo a contrarreloj para negociar con los diputados oficialistas y sus aliados en busca de la aprobación de un préstamo por US$500 millones; un informe de ese organismo financiero internacional da cuenta que la fecha límite venció el pasado 30 de abril, por lo que podría proceder a cancelarlo.
El ministro de Finanzas Públicas Álvaro González Ricci confirmó a La Hora que el plazo para aprobar el “Préstamo para Políticas de desarrollo de respuesta y recuperación ante la crisis en Guatemala (DLP, en inglés)” por US$500 millones, financiado por el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), venció el jueves 26 de abril, por lo que “ya se habló” con el BM para que “espere unos días” con el propósito de “ver si se logra” aprobar en tercera lectura en el Congreso.
El problema se originó porque luego de obtener el dictamen favorable en tiempo récord para la iniciativa 6050, que contiene el cuestionado crédito, así como pasar en primera y segunda lectura, de forma inesperada el oficialismo perdió apoyo cuando correspondía la tercera lectura y no se llegó a alcanzar el quórum en la sesión plenaria el pasado 27 de abril.
Pese al anuncio del titular de la cartera de Finanzas, en un documento de evaluación del BM para Guatemala, publicado el 6 de abril detalla que ya se había extendido el plazo al 30 abril, para que el Gobierno hiciera los trámites para la aprobación del préstamo por parte del Congreso, en el primer trimestre de 2022.
El equipo del organismo financiero internacional también observó durante la misión: “Suponiendo que el Banco apruebe la prórroga de la vigencia (como finalmente lo hizo), si la operación de préstamo no se firma y declara efectiva antes del 30 de abril de 2022, lamentablemente, el préstamo tendría que ser cancelado”.
Pero González Ricci agregó que fue el propio Ministerio el que propuso la fecha del 26 de abril pensando que el préstamo “por lo sencillo, transparente y beneficioso que es para el país”, se iba a aprobar en el Congreso en esa fecha.
“Pues no se aprobó el 26 de abril, ya hablamos con el Banco Mundial para que nos esperen, por así decirlo, algunos días con el objeto de que el préstamo pueda ser aprobado”, recalcó González Ricci.
Recordó que el crédito se concedió en 2020 destinado a fortalecer los apoyos sociales para atender la pandemia del COVID-19, por lo cual considera que “ese cupo quedó comprometido, nunca se usó, vimos que el cupo estaba disponible y lo empezamos a negociar con el objeto de poder usarlo para lo que actualmente se está proponiendo”.
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Giammattei en contrarreloj para negociar préstamos de US$500 millones 👉🏼 [https://t.co/y3kLvkHqSb] pic.twitter.com/ii63gc9O2P— Diario La Hora (@lahoragt) May 2, 2022
¿EN CAMINO PARA NEGOCIAR OTRO PRÉSTAMO?
En particular, el documento del BM indica que “si bien, está pendiente la aprobación del Congreso”, el Gobierno ya ha avanzado en las acciones previas e indicadores de seguimiento establecidos su plan de acción.
Con ello se refiere a que el Congreso ha aprobado algunas iniciativas “estrechamente asociadas” en torno al préstamo, como el Decreto 288-2020 sobre la Política Nacional de Parteras de los Cuatro Pueblos de Guatemala, el Decreto 2-2021 Ley de Arrendamientos y el acuerdo entre Guatemala y México sobre asistencia administrativa mutua e intercambio de información en materia aduanera.
Lo anterior significa que de la aprobación del DLP-1 de US$500 millones depende la aprobación del DPL-2, un préstamo por US$250 millones.
PRÉSTAMO DPL-2
Según los documentos del BM, el DLP-2 llamado “Préstamo para Políticas de desarrollo de respuesta y recuperación ante la segunda crisis en Guatemala”, por US$250 millones, tiene como fin:
• Proteger y mejorar el capital humano de los pobres y vulnerables.
• Sentar las bases de una recuperación sostenible y verde.
• Promover la transparencia del sector público y mejorar la administración de ingresos.
RICCI: NOS VAMOS A CERRAR PUERTAS
El ministro de Finanzas advirtió que de no aprobarse el préstamos de US$500 millones, el país cerrará puertas para otro tipo de “ayudas”.
“Recordemos que amarrados a estos préstamos vienen cooperaciones técnicas, donaciones, un sin fin de apoyos que puede no ser préstamos, pero que son de mucho dinero”, explicó.
Finalmente, resaltó que dicho préstamo “no es endeudar más al país”, sino es “simplemente la sustitución de bonos que ya están aprobados”.
SIN APOYO DEL OFICIALISMO
El 27 de abril en la trigésima octava sesión ordinaria del Congreso, no se observó el apoyo de los congresistas al Ejecutivo, pues de forma extraña, el oficialismo se quedó sin el quórum para aprobar en tercer debate dicho préstamo.
Ante ese contexto, surgió la duda sobre la poca participación de los oficialistas para aprobar esta iniciativa, ya que en el pasado apoyaron el Presupuesto General de la Nación para este 2022 y la ampliación presupuestaria de Q3 mil millones para el Ministerio de Comunicaciones (CIV), la elección de Shirley Rivera y su planilla para dirigir el Legislativo, entre otras.
PANORAMA PREELECTORAL
Recientemente, los analistas Édgar Ortiz, consultor en temas jurídicos de la Fundación Libertad y Desarrollo y Eddie Cux, presidente de Acción Ciudadana (AC), comentaron a La Hora Economía que el hecho que este 2022 sea año preelectoral podría incidir en la postergación para la aprobación de la iniciativa 6050, así como la coyuntura sobre la elección del próximo Fiscal General y Rector de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC).
“Como es un año preelectoral, tengo la sensación de que los diputados están dándole la espalda al Presidente, y querrán cosas a cambio, pero no como producto del préstamo en sí, sino como una forma de negociación. Cada día que pasa, el presidente de turno pierde poder”, señaló Ortiz, quien además, prevé que esta “lógica preelectoral” se observará en los últimos meses en el pleno.
Por su parte, Cux indicó que podría haber una influencia por parte de la elección de Fiscal General y del Rector de la USAC, pues asegura que existe un descontento y se observa la reacción de la ciudadanía en contra de todo lo que impulsa el oficialismo a su favor.
Sin embargo, el presidente de AC, advirtió que “no todo está escrito”, ya que existen antecedentes de las formas de “abuso de poder” para aprobar otras iniciativas.
SOBRE EL PRÉSTAMO
La iniciativa 6050, fue presentada por el Organismo Ejecutivo ante Dirección Legislativa del Organismo Legislativo el pasado 17 de marzo, posteriormente, el 31 de marzo recibió dictamen favorable por parte de la Comisión de Finanzas Públicas y Moneda, el 19 de abril fue conocida en primer debate y el 20 de abril pasó el segundo debate.
El gobierno del presidente Alejando Giammattei, asegura que el préstamo “no es deuda” porque servirá para pagos anticipados, reducir el costo de la tasa de interés de la deuda pública y crear un ahorro para las finanzas del Estado.
No obstante, en su versión original, esos recursos estaban destinados para “amortiguar los impactos en ingresos, nutrición y empleo de los grupos vulnerables” por la pandemia del COVID-19, según Marco Scuriatti, representante del BM para Guatemala.