Hugo Gordillo
Escritor
Ecos
Hoy el sol parece con rayos
Más fuertes y en aerosol.
La sed de los animales
Se parece a mi sed de amarte.
La campiña es más desértica
Que la sequedad de mi corazón.
A veces te veo
Como la corriente del niño,
Y quisiera empaparte.
Este es el día más caluroso,
Y mientras me acerco a ti,
La radio me recuerda
Que destruimos la capa de ozono.
Besos sin sabor
Tu piel sabe
A pintura seca,
Tu boca sabe
A metal frío,
Nena,
No más tatuajes,
Ni más piercing;
¡Por favor!
Bienaventuranzas
Bienaventurados
los limpios de corazón,
porque ellos no padecerán
problemas cardiacos.
Bienaventurados
los descorazonados,
Porque ellos no pagarán
El electrocardiograma.
Bienaventurados
los duros de corazón,
porque ellos resistirán
Los flechazos de Cupido.
Bienaventurados
los borrachos de corazón,
porque ellos encontrarán
en la cantina un marca-vasos.
Juego de azar
Antes,
Los niños jugaban
De policías y ladrones.
Todos se distribuían
Entre uno y otro bando.
Hoy,
Los niños juegan
De policías y ladrones.
Y, absolutamente todos,
Pertenecen al mismo bando:
El de policías y ladrones.
La mujer esa
Usted compadre, bien lo sabe,
Que cuando las bonitas se ríen,
Se les hacen comillas en la boca.
Aunque a mi mujer se le dibujan
Unos corchetes de desmadre.
Es tan trompuda la ingrata,
Que para describir su figurón
Puntos suspensivos me faltan.
Fea la quise, así lo quiso Dios
Con sus piernas de paréntesis
Un ojo huero, los dos bizcos
Y silabeando en la conversación.
La amé con su cara de bruja,
Se lo juro por mi santa madre,
Pero no la perdono, compadre,
Si es más larga que una esdrújula
Eusebio el sabio.
Le importa un pepino su fealdad
Y esa figura de metro y medio.
Eusebio confía felizmente
En su lengua profesora.
Si fuese mujer, sería la más larga.
Igualmente les expresa su amor
A reinas salientes, entrantes
Y demás finalistas.
No hay madrina del deporte
A la que no le haya tirado balón.
Ya se le declaró el muy osado
A la nalgas tristes
Y a la culo contento.
Todas lo mandaron a la chingada,
Pero él insiste con su lema:
No le miento maestro,
De diez a las que les propongo,
Por lo menos dos me caen.
¡Ay, noches!
Como nunca en mi vida,
Esta noche la necesito.
Mal recuerdo a Neruda,
Si ella no está conmigo,
¿…Será de otro?
Me pregunto con torpeza.
Me siento en la cama
La busco por la habitación.
Cómo podría maldecir
A mi dulce compañía
Si yo soy quien la ignora,
Cuando la noche vence al día.
A pesar del frío, salgo a buscar
Y me lo tengo merecido,
Porque en noches como esta, olvido
Entrar la nica para orinar.
Todo poderoso
Siéntete el dueño del mundo,
Ignorante de la corporatocracia.
Siéntete el motor del desarrollo,
Sin dinero para la gasolina.
Siéntete heredero del planeta
Arrimadito, hijo de casa.
Siéntete amo de esclavos
Esclavizado como vil capataz.
Siéntete prestamista global,
Contador de maquila bancaria.
¡Siéntete el todo poderoso!
¿Qué más quieres, pendejo?
Si lo tienes todo en una cuenta.
En una cuenta de Yahoo.
Tierra
Una cosa es el grito de ¡tierra!
Y otra que malinterpretes
El despojo extranjero
A los terrícolas de acá.
Si me echaste tierra
Porque tienes otro gato,
Disfruta del ingrato
Y no mires para atrás.
Echa el cuerpo a tierra
Cuantas veces puedas
Con el animal de tu antojo
Si te quieres aparear.
Y no vengas a hacer tierra
Para hacerme quedar mal
Cuando juego con mi gata
Al calentamiento global.
