Las muertes e infecciones por coronavirus alcanzaron sus niveles más altos en Ucrania ayer, un país con una de las tasas de vacunación más bajas en Europa.
Las autoridades reportaron 22.415 casos confirmados y 546 muertes en las últimas 24 horas, los mayores números desde el comienzo de la pandemia.
Las autoridades atribuyen el aumento de las infecciones a la lenta campaña de vacunación en el país de 41 millones de habitantes. Los ucranianos pueden escoger entre las inyecciones de Pfizer, Moderna, AstraZeneca y Sinovac, pero solamente 15% de la población ha completado el esquema, la tasa más baja en Europa después de Armenia.
En total, el país ha registrado más de 2,7 millones de infecciones y 62.389 muertes.
Ucrania ha enfrentado un aumento consistente de las infecciones en las últimas semanas, que ha forzado al gobierno a reintroducir restricciones en lugares públicos y en el uso del transporte público. A partir del jueves, se necesita tener un certificado de vacunación o una prueba negativa para abordar aviones, trenes y autobuses de larga distancia.
Las medidas han hecho florecer un mercado negro de certificados falsos y el presidente Volodymyr Zelenskyy encabezó esta semana una reunión sobre formas de combatir esa práctica. La policía sospecha que trabajadores en algunos hospitales están involucrados en la emisión de certificados falsos de vacunación.
Pese al aumento de las infecciones, el gobierno se ha mostrado renuente a ordenar otro confinamiento para no dañar más la economía, ya debilitada por el conflicto con Rusia, que se anexó la Península de Crimea en 2014 y apoya una insurgencia separatista en el oriente industrial de Ucrania.
«Hay solamente dos vías: una vacunación o un encierro», dijo Zelenskyy. «Yo estoy en contra del encierro, por el bien de la economía».
Para alentar las vacunaciones, las autoridades han comenzado a ofrecerlas en centros comerciales. Al aumentar las infecciones, el escepticismo se redujo y un récord de más de 251.000 se vacunaron en las últimas 24 horas.